El PSC cambia el relato en Interior
La consejera Núria Parlon traza las líneas maestras de su mandato anunciando una 'nueva etapa' en el departamento
La consejera de Interior, Nuria Parlón, presentó este lunes en una rueda de prensa la nueva estructura de su departamento. Todos los focos estuvieron puestos en el nombramiento de Josep Lluís Trapero como director general de los Mossos d’Esquadra. Sin embargo hubo otras cosas llamativas de la nueva consejera de Interior, como por ejemplo su retórica, que se aleja del relato de ERC y de su predecesor en el cargo Joan Ignasi Elena.
Núria Parlon señaló que la prioridad de su departamento será “revertir la curva delictiva que se expresa de forma incidente en toda una serie de delitos importantes y de criminalidad”. La consejera habló de coordinación entre cuerpos de seguridad y con los ayuntamientos para “mejorar la eficacia policial”. El objetivo, dijo, es “reducir los delitos que generan más inseguridad” y “disminuir la percepción de inseguridad” de la ciudadanía.
Subrayó la idea de abrir “una nueva etapa” en Interior, tras el controvertido mandato de Joan Ignasi Elena. Fue él quien dijo que Cataluña es un lugar seguro, y quien atribuyó el aumento de la delincuencia a casos aislados, “percepciones de inseguridad” y bulos de la extrema derecha. La rueda de prensa de Parlon marca un cambio de discurso, y ahora habrá que ver si es capaz de trasladarlo a la realidad con políticas eficientes.
En qué delitos se centrará la nueva consejería
Salvador Illa ya avanzó en campaña que una de sus prioridades era recuperar el control del orden público, gravemente deteriorado estos últimos años en Cataluña. Consciente de que es una de las prioridades de su gobierno, ha hecho concesiones a ERC en algunas áreas ideológicas como acción exterior, la lengua y el feminismo, a cambio de ejercer un control absoluto sobre el Departamento de Interior. La nueva consejera ha querido marcar desde el primer momento una ruptura con el relato de la etapa anterior.
Núria Parlon ha dejado claro que la prioridad será perseguir el crimen organizado, en especial el tráfico y cultivo de marihuana, que está haciendo estragos en Cataluña. Al mismo tiempo, se propone perseguir los pequeños delitos que preocupan a la ciudadanía y alteran su día a día.
Mencionó, en particular, los hurtos, los robos con violencia, las agresiones sexuales, el uso de armas blancas, las peleas, los robos de vehículo y las entradas en domicilios.
Además, la inseguridad afecta especialmente a Barcelona pero no solo a la capital. En este sentido, la consejera se ha marcado como objetivo “tener una relación muy fluida con alcaldes y concejales de seguridad ciudadana” para “trabajar de forma coordinada aquellas problemáticas que les afectan de acuerdo con las singularidades que tiene el territorio”. En el caso de Barcelona, especialmente castigada por la delincuencia, anunció una reunión inminente con el alcalde, Jaume Collboni, y el concejal de seguridad, Albert Batlle.
Vivienda y seguridad, prioridades del PSC
Salvador Illa trazó en la campaña electoral su modelo de seguridad, opuesto en buena medida al modelo buenista y antipunitivista de ERC. El entonces candidato socialista prometió reforzar la seguridad con 570 nuevos mossos al año patrullando las calles catalanas. Su propuesta entroncaba con la apuesta por la seguridad de los alcaldes socialista del área metropolitana, que pasa por la creación de unidades especiales de los Mossos d’Esquadra para actuar en las zonas más conflictivas.
Una de las primeras reuniones del nuevo presidente de la Generalitat ha sido precisamente con el alcalde de Barcelona, Jaume Collboni. Allí, presidente y alcalde coincidieron en señalar la vivienda y la seguridad como sus dos grandes prioridades. Esta línea marcará el primer tramo de la legislatura, donde también se atenderán problemas como la movilidad o la calidad de vida en los barrios.
De la misma forma que Jaume Collboni trata de distanciarse de la herencia de los Comunes pese a haber llegado a la alcaldía gracias a su apoyo, también Salvador Illa quiere romper con ERC, en cuestiones como la seguridad, pese a haber sido investido con sus votos. Habrá que ver si se queda solo en las intenciones, o verdaderamente estamos antes una nueva etapa para revertir la delincuencia, la inseguridad y el incivismo en Cataluña.
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