Los presos del procés mandan una advertencia a Pedro Sánchez

A tres días para el inicio de la nueva legislatura y con la investidura en el aire, Junts aún no ha desvelado si optará por el bloqueo o dará su brazo a torcer. La amnistía sigue siendo una de las condiciones innegociables para el partido de Carles Puigdemont. Pero la decisión ha provocado un cisma en el seno de los presos.

Los presos en la órbita de ERC, como Oriol Junqueras y Dolors Bassa, son partidarios de negociar condiciones concretas sin poner en riesgo la legislatura. Los presos de Junts, como Jordi Turull y Josep Rull, quieren tensar la cuerda hasta al final. Aun a riesgo de que se acabe rompiendo.

Aviso de Joaquim Forn

Uno de los últimos en levantar la voz ha sido Joaquim Forn, de la órbita de Junts. El exconseller de Interior condenado por sedición ha advertido al PSOE de que “la amnistía no es el punto de llegada sino de partida”. Para él, la ley de amnistía no bastará para resolver el conflicto catalán.

En una entrevista en Catalunya Ràdio, el exconseller se ha referido a la oferta socialista de una ley de amnistía a cambio del apoyo de los siete diputados de Junts. Para Forn, con esto no habrá suficiente. “La gente no fue a votar el 1 de octubre para la amnistía, sino para otra cosa”, ha afirmado.

Forn deja claro así que solo negociarán a cambio de su objetivo real, que es el referéndum de autodeterminación para Cataluña. En cuanto a la amnistía, reitera el mismo mensaje que viene transmitiendo el entorno de Puigdemont. No aceptarán una solución individual, sino una amnistía general “para los 4.000 represaliados” del procés.

A favor del frente común independentista

Joaquim Forn se alinea con el sector duro de Junts, dispuesto a bloquear la legislatura si no hay un compromiso firme con la autodeterminación. Algo que contrasta con una posición más pragmática de presos y “represaliados” como Junqueras, Bassa o Marta Rovira. Estos piden avances como la transferencia de Cercanías y un pacto fiscal para Cataluña.

Esquerra también ha puesto énfasis en el frente común independentista, que Junts ha rechazado por discrepancias estratégicas. Los postconvergentes no se fían de ERC y quieren llevar las negociaciones por separado y discretamente. Los republicanos, en cambio, insisten en que los 14 diputados independentistas negocien juntos la investidura.

Joaquim Forn también se ha pronunciado sobre esto. Para él, los dos partidos independentistas deben negociar juntos “las cuestiones de país” en Madrid. Ha recordado que el independentismo es más fuerte unido que separado. Y se ha mostrado confiado en que habrá avances en este sentido.

Turull y Rovira, llamados a entenderse

La única posibilidad ahora mismo de restablecer los puentes entre ambas formaciones es el entendimiento entre Jordi Turull y Marta Rovira. A pesar de sus discrepancias, los dos mantienen una excelente relación. Los sectores moderados de ambas formaciones les ven como los dos líderes llamados a la reconstrucción de la unidad.