El PP catalán cierra filas con Alejandro Fernández

El líder del PPC, Alejandro Fernández, hizo una apuesta y la ganó.

Todos recordarán la travesía en el desierto del PP catalán durante años y las dudas que hubo con respecto al liderazgo de Fernández. Fueron aquellas curiosas semanas en las que planeaba la duda de que Feijóo iba a quitar a Fernández de la dirección, algo que provocó una fuerte respuesta por parte de varias organizaciones constitucionalistas de Cataluña.

Uno de los motivos de que Alejandro Fernández tenga personalidad política para bien y para mal es su oposición en redondo a la lógica procesista.

Fernández ha defendido la idea de que un PP fuerte en Cataluña debe ofrecer un discurso que no tenga ninguna dependencia del procesismo, en particular, del procesismo de Junts. En este sentido, Fernández ha planteado serias dudas sobre la idea de que Junts está en tránsito hacia una especie de nueva Convergencia.

Y el caso es que, ahora, Fernández recoge los frutos de su apuesta por Cataluña. Después de las elecciones autonómicas y el éxito del PPC, el liderazgo de Fernández se mantiene firme. El encargado de transmitirlo ha sido otro Fernandez, en este caso, el portavoz del partido, Juan Fernandez.

Se impone la línea de Fernández

En una entrevista para la Agencia Catalana de Noticias (ACN), el portavoz del PPC, Juan Fernandez, ha venido a decir que el liderazgo de Alejandro Fernández es muy sólido. En este sentido, ha calificado de “frivolidad” convocar el congreso del partido porque, entre otras cosas, “no hay cuestionamiento interno” sobre la figura de Alejandro Fernández.

“Con una situación de emergencia social y con la parálisis en la que está inmersa Cataluña, me parecería una frivolidad que desde el PPC estemos hablando de un congreso o de un futuro congreso del partido. Ni hay fecha ni está ahora mismo en nuestra agenda”, ha señalado el portavoz.

Es decir, que el relato de Alejandro Fernández es el que se ha impuesto. Es de esperar, pues, que el PPC sea durante esta legislatura el altavoz más contundente del antiprocesismo. En este sentido, cabe destacar que la oposición al Govern del presidente Illa tendrá dos flancos: Junts y el constitucionalismo, liderado por el PP.

Contraste con ERC y Junts

Esta situación contrasta con ERC y Junts, que se puede decir que en líneas generales han sido los dos partidos más perjudicados por el fin de la mayoría indepe en el Parlament.

Por su parte, Junts tiene dentro de poco el congreso del partido, que previsiblemente consolidará a Puigdemont como líder. Sin perjuicio de que el expresidente dijo de manera explícita que dejaría la política si no conseguía el control de la Generalitat.

Por otro lado, ERC enfrenta también un congreso muy importante, con Oriol Junqueras como favorito para liderar el partido. Al igual que Junts, y tal vez con más urgencia, los republicanos también tendrán que diseñar una nueva estrategia política a largo plazo.