El PP de Alejandro Fernández pasa a Vox y liderará la derecha en Cataluña
Es el partido que más crece en votos y escaños y da la vuelta al equilibrio de las fuerzas de la derecha en el Parlament
El PP de Alejandro Fernández ha conseguido esta noche su segundo mejor resultado de la historia en Cataluña con 15 escaños, y lo que es más importante, consigue superar por cuatro escaños a Vox. Los populares se han impuesto a los de Ignacio Garriga en votos y en escaños, y liderará la derecha en el Parlament. En una primera valoración, Dolors Montserrat ha dicho que “el PP ha vuelto como partido de la Cataluña sensata”, y que “hoy empieza una nueva etapa en Cataluña”.
Montserrat ha prometido una nueva etapa en la que el PP “garantizará la convivencia entre catalanes y el resto de España” y “vigilará que la ley se cumpla para todos”. La dirigente del PP ha recordado que no hay “ningún proyecto político por encima de las personas”, y ha puesto a su partido como garante del cumplimiento de la ley. En su intervención ha dejado entrever la satisfacción que se respira esta noche en la sede del PP, que tras un final de campaña de infarto ha conseguido asegurar la cuarta plaza.
El PP es el partido que más sube, incluso más que el PSC, con un 7% más de votos y 12 escaños más que en las elecciones catalanas de 2021. Vox no ha bajado, pero su crecimiento es mucho más modesto y no llega al 1%. Esto supone un nuevo equilibrio de fuerzas en el espacio conservador, que tendrá impacto no solo en el arco parlamentario catalán sino también en la relación Feijóo-Abascal a nivel nacional.
Voto de confianza a los populares
La victoria de Alejandro Fernández supone un voto de confianza de los catalanes al PP para frenar a la izquierda y al procesismo. El PP había planteado una campaña muy centrada en la inseguridad y problemas como la inmigración ilegal y la okupación. Pero también ofreció un modelo alternativo a la larga década procesista con propuestas de desarrollo económico y orden social que han acabado atrayendo al votante conservador.
También ha contribuido a ello el ascendente de Alejandro Fernández, que se reveló en la última legislatura como uno de los líderes más destacados. En los últimos días parecía que Vox estrechaba distancias con los populares, pero el PP planteó un arreón final con una ambiciosa campaña. En ella agitaba el modelo Albiol e imitaba el lema de Vox para recortar distancias con los de Ignacio Garriga.
Pese a que la victoria del PSC refuerza a Pedro Sánchez, la victoria en las gallegas y el buen resultado en las catalanas hace que Feijóo llegue a las elecciones europeas con buenas sensaciones. Eso sí, el subidón del PP es un toque de atención a la dirección nacional del PP. El triunfo de Alejandro Fernández es también el de la línea del PP más escorada a la derecha e intransigente con el independentismo.
Un aval al PP de Alejandro Fernández
Con estos resultados, Alejandro Fernández tendrá un papel importante en la formación de gobierno de cara a una segunda vuelta. Si el PP se abstiene podría facilitar un gobierno de PSC, ERC y los Comunes, aunque el candidato popular ya dejó claro que solo facilitaría la investidura de Illa si rompe con el procesismo. En todo caso, podría tener la llave de la gobernabilidad y la posibilidad de evitar nuevas elecciones.
El PP se presentaba a estas elecciones con la aspiración de convertirse en la primera fuerza de la derecha constitucionalista en Cataluña. Alejandro Fernández planteó una campaña basada en la esperanza de pasar página al procés y muy centrada en temas estrella como la okupación y la inseguridad. El resultado de hoy es muy importante para el afianzamiento del PP en la correlación de fuerzas de la derecha a nivel nacional.
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