¿Podrá aguantarlo Pedro Sánchez?

Pedro Sánchez ha demostrado tener una capacidad negociadora admirable, pero incluso él tiene sus límites ante la voracidad inagotable del independentismo. El optimismo reinante en Ferraz se va agotando con el paso de los días y la intransigencia de Junts. La pregunta es si Pedro Sánchez podrá aguantar el pulso a Puigdemont.

El último desafío de Junts al PSOE lo vimos ayer en pleno debate de investidura en Madrid. “De momento no se dan las condiciones para negociar con el PSOE”, dijo Míriam Nogueras desde el estrado del Congreso de los Diputados. Su discurso, lleno de soflamas, pone las cosas aún más difíciles al PSOE y a Pedro Sánchez.

La condición para investir a Pedro Sánchez “no puede ser un parche para sacar adelante la investidura y cerrar el paso a la derecha", dijo Míriam Nogueras. "Si hay un acuerdo tiene que ser histórico, un compromiso que ningún gobierno español ha sido capaz de hacer realidad desde 1714”.

Junts se planta con el referéndum

Junts mantiene que su condición para negociar la investidura es “reconocer la legitimidad democrática del independentismo y del 1 de octubre”. En palabras de Míriam Nogueras, a cambio de sus votos el PSOE debe “abandonar la vía judicial, crear un mediador y fijar como únicos límites los vinculados a los tratados internacionales”.

Es lo mismo que planteó Carles Puigdemont como condicionantes para empezar a negociar. Ahora Junts le recuerda al PSOE que “nuestro objetivo no es reformar España ni investir presidentes españoles”. Nogueras dejó claro que “queremos la independencia porque no queremos seguir retrocediendo con España”.

Ante esto, muchos se preguntan qué tiene que seguir negociando el PSOE con el partido de Puigdemont. Los socialistas han marcado el referéndum como una línea roja que no están dispuestos a cruzar. Pero si Junts acepta una rebaja de sus pretensiones tendrá difícil justificarlo ante el independentismo expectante.

Más presión para Sánchez

Pedro Sánchez lo tiene ahora un poco más difícil. No solo porque de momento Puigdemont no baja del burro, sino también por la movilización masiva de españoles en las calles y por el baño de Feijóo en el debate de investidura. Cada vez se le está haciendo más difícil al PSOE justificar sus concesiones al independentismo.

Feijóo dio en el clavo cuando dijo que “si PSOE y Junts llegan a un pacto, o unos u otros habrán mentido”. En Ferraz siguen esperando que con el paso de los días Puigdemont entienda la necesidad del acuerdo. La gran incógnita es saber dónde están los límites de Pedro Sánchez y si podrá aguantarlo.