Plataforma per la Llengua, la autodenominada ONG del catalán, cree que los “catalanes que esconden la lengua” están detrás de la “castellanización del país”. Así lo advierte a raíz del InformeCAT, un estudio sobre la salud de la lengua catalana.
Según los datos, un 95% de los habitantes de los llamados Països Catalans (Cataluña, Comunidad Valenciana y Baleares) habla bien el castellano. En cambio, solo un 65,1% domina el catalán. Un dato “preocupante” según el presidente de la entidad, Òscar Escuder, que ha señalado a los culpables.
“El decalaje del conocimiento entre estas dos lenguas se debe a los mismos hábitos nocivos de los catalanohablantes”, ha afirmado Escuder. Para él, “se crea un entorno mucho más castellanohablante”. Esto tiene “un efecto perverso”, ha dicho, y es que “puedes llegar a pensar que es natural y no fruto de ninguna imposición”.
El presidente de la entidad ha puesto el énfasis en la “desigualdad legal” y la “desprotección jurídica” que condena el catalán a ser “una lengua minorizada”. En este sentido, ha recordado que el catalán es una lengua que se ha “prohibido y perseguido” por la “imposición de una lengua extranjera”.
Añade que hay normas de protección del catalán que no se están cumpliendo. Según el informe, el 81% de los juzgados rechazan las peticiones de los catalanes que solicitan la documentación y los trámites en catalán.
Hay otro dato significativo, y es que la mayoría de los habitantes de los “Països Catalans” cree que los funcionarios deben saber catalán. La Plataforma destaca este hecho como positivo y lanza un mensaje de optimismo: “El catalán es una lengua atractiva y que tiene vitalidad a pesar de las presiones que ha sufrido en todos sus territorios”.
En este sentido, Escuder ha indicado que “avanzar hacia la normalidad es necesario y perfectamente posible”.
Más datos del InformeCAT que llaman la atención. El 84% de los catalanohablantes quieren que el catalán sea oficial en la Unión Europea. Y el 95,3% creen que es una lengua útil para los jóvenes. Una demostración, según la entidad, de la “estima por la lengua”.