La tertuliana Pilar Rahola, emocionada
POLÍTICA

Pilar Rahola intenta defender a Puigdemont y recibe un sonoro zasca

Le preguntan por el relator y la primera cumbre internacional


La tertuliana Pilar Rahola, curtida en mil batallas, se encuentra ahora ante el gran reto de su vida: defender como sea el papelón de Puigdemont tras haber hecho presidente a Pedro Sánchez. Empezó timorata, cambiando lo de “acuerdo histórico” por “acuerdo insólito”, pero ahora se ha vuelto a desatar.

“El pacto de Carles Puigdemont está obrando milagros”, dice eufórica la Rahola, “ahora han descubierto el lawfare”. Acompaña el vídeo con las declaraciones de la entrevista a Pedro Sánchez en TVE. El presidente del Gobierno reconocía que “se han instrumentalizado instituciones públicas de nuestro país”.

Al final, sin embargo, en su defensa a ultranza de todo lo que haga Puigdemont le ha salido el tiro por la culata. Jordi, un tuitero independentista, le responde con unas preguntas. “¿Ya sabemos el nombre del relator internacional, de la primera reunión que se tenía que hacer en noviembre, y del catalán oficial en la UE?

Ya no cuela

Y es que, pese al admirable empeño de Rahola, los independentistas ya no tragan con los embustes de los partidos procesistas. Cunde la sensación de que el PSOE les ha vuelto a levantar la camiseta. Mientras hacen gestos y declaraciones en público, los compromisos del acuerdo siguen sin llegar.

Fotomontaje con la tertuliana Pilar Rahola y el expresidente Carles Puigdemont muy sonrientes con una captura de twitter de fondo

En realidad, es llamativo que Pedro Sánchez no mencione a los independentistas en ningún momento de la entrevista. Habla de “instrumentalización de la policía para perseguir adversarios políticos”, en referencia al PP y el caso Kitchen. Y también deja claro que “las comisiones de investigación no vinculan las sentencias judiciales”.

Rahola se ha quedado sola con Puigdemont y su círculo más próximo defendiendo algo que los independentistas consideran una traición. Mientras, el PSOE sigue haciendo malabares para tener contentos a los independentistas sin cruzar demasiadas líneas. Algo que solo parece convencer a los puigdemontistas más acérrimos.

Sigue la tensión

Ferraz y Waterloo mantienen la tensión por la desconfianza en esta nueva etapa como socios de legislatura. Socialistas e independentistas se reunirán esta semana por primera vez. El PSOE lo vende como una primera toma de contacto “para llegar a acuerdos”, Junts como el primer paso hacia el referéndum.

Esta semana se ha conocido que Puigdemont planteó en privado la posibilidad de votar con el PP una moción de censura contra el Gobierno. Su mano derecha, Toni Comín, confirmó también que su objetivo último es el referéndum acordado. Pero en el PSOE tienen claro que no quieren cruzar esta línea.

De hecho, en Moncloa creen que Junts tiene más que perder que no que ganar echando a Sánchez. De algún modo, el PSOE se ha convertido en la garantía de supervivencia de Junts en plena descomposición del procesismo. No en vano muchos, en la línea del zasca a Pilar Rahola, ya no se tragan el juego de Junts.

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