Pere Aragonès vuelve a confundir Govern y partido: su 'nueva' propuesta de referéndum

El president de la Generalitat de Catalunya, Pere Aragonès, sigue dispuesto a intentarlo. No acaba de encontrar su sitio en una campaña electoral polarizada por Carles Puigdemont y donde Salvador Illa es el favorito. Sin embargo, el líder de Esquerra está empeñado en marcar la agenda política catalana. Tras el fracaso de su propuesta sobre financiación singular, este martes llega el turno de un referéndum acordado. 

No, no estamos en 2010, aunque lo parezca. De un lado vemos a Junts per Catalunya hablarnos del gobierno de los mejores y a Esquerra pidiendo un pacto fiscal y una consulta. Este es el resultado del Procés: volver a la casilla de salida, casi con los mismos dirigentes y sin haber conseguido nada por el camino. 

Pere Aragonès quiere un referéndum a la escocesa

Tras seis meses de trabajo, Joan Ridao, responsable del Instituto de Estudios por el Autogobierno -organismo que se inventó Aragonès y por el que Ridao cobra 120.000 euros-, ha llegado a la conclusión que se debe copiar el modelo escocés. Oh, sorpresa, ¿verdad? Este mismo martes, Pere Aragonès presentará las conclusiones tras la propuesta de un grupo de académicos y el texto de Joan Ridao. Es cierto, cuesta un poco de entender el procedimiento, más para llegar a la conclusión que ERC ya defendía desde el uno de octubre: una consulta pactada con el Estado sobre la independencia.

El president de la Generalitat presentará este martes las conclusiones, aprovechando una vez más la institución y confundiendo el país y el partido. Esta era precisamente una de las críticas que los republicanos hacían históricamente a Jordi Pujol. Aragonès ya usó el Govern para presentar su propuesta de financiación y lo volverá a hacer hoy en su "vía escocesa".

La idea que defenderá este martes es que haya una consulta pactada con el Estado, con una pregunta clara sobre la independencia y sin un mínimo de participación ni de votos. Es decir, si vota un 35% de la ciudadanía y el sí gana con el 50,01% de los votos, el resultado sería válido. Lo curioso es que el grupo de expertos que creó el propio Pere Aragonès ya le avisaron de que la Constitución no ampara votaciones para segregar parte del territorio español. La respuesta del president fue echar balones fuera: tras la consulta, defendió Aragonès, ya se buscaría el acuerdo y las formas legales oportunas.

La idea que defenderá Pere Aragonès sería la culminación del acuerdo de claridad que presentó hace ya unos meses y que no fue secundado por ningún partido. A partir de aquí, el Govern designó a varios expertos, que presentaron cinco propuestas, y Esquerra -ergo, la Generalitat- escogió la vía del referéndum pactado. Ahora, ERC aprovecha que quedan 40 días para las elecciones para anunciar las conclusiones de Joan Ridao a bombo y platillo, con la intención de recuperar espacio público.

Sin embargo, las otras formaciones parecen decididas a no dar cancha alguna a Pere Aragonès. Sus propuestas son ignoradas y menospreciadas por los partidos catalanes, que quieren mostrar la incapacidad de Esquerra de tejer acuerdos desde la Generalitat. De hecho, el PP ya denunciaba este fin de semana el uso partidista que hacen los republicanos del Govern.

Dolors Montserrat, dirigente popular, desvelaba que su formación ha llevado a Pere Aragonès a la Junta Electoral por unas publicaciones de Acción Climática por hacer publicitar acciones del Govern, algo ilegal ahora que están convocadas las elecciones. "No permitiremos el juego sucio de Esquerra utilizando los recursos pagados por todos los catalanes para conseguir votos", aseguró Montserrat.