Europa Press Pedro Sánchez devuelve Cataluña al 2017
Carles Puigdemont se presenta y decide recuperar el Procés: si gana habrá referéndum y confrontación. Se trata de todo lo contrario a la nueva etapa que prometía el PSOE
Ya es oficial: Carles Puigdemont será candidato de Junts a las elecciones del 12 de mayo y la prensa procesista parece decidida a que monopolice la campaña electoral. Solo hacía falta escuchar a Jordi Basté la mañana de este 22 de marzo. Emocionado, enfatizaba el "golpe de efecto", sacaba pecho del cabreo de la prensa de Madrid y hablaba hasta de cerrar el círculo. Se les olvida que Puigdemont ya se presentó en 2017 y en 2021 y que no volvió, aunque parecen decididos a creerse que a la tercera va la vencida.
La candidatura de Carles Puigdemont conlleva implícitas varias derivadas y pocas de ellas positivas. Volverá la matraca del referéndum y los debates centrados en las emociones y no en la política. Se hablará mucho más del 'exilio', de la autodeterminación y de la legitimidad de Puigdemont que no de la sequía, la inseguridad, los impuestos o la educación. Junts arrastrará ERC al fango, porque Esquerra vive el retorno de Puigdemont desde la inseguridad y el miedo, como ha sucedido siempre entre republicanos y la antigua Convergencia.
Es así: lamentablemente volvemos a 2017, cuando lo más importante eran las listas conjuntas indepes y la convocatoria de un referéndum la siguiente legislatura. Da igual si más empresas trasladan su sede fuera de Cataluña, poco importa si el propio CEO marca que un 52% de los catalanes están en contra de la independencia. Junts sabe que Carles Puigdemont es su única carta y que condicionará la campaña electoral, tanto en Barcelona como en Madrid.
El procesismo, restituido por Pedro Sánchez cuando parecía que estaba muerto | Europa Press, es.e-noticies.cat
El retorno de Puigdemont recupera el Procés, sin ninguna duda, y da la razón a los que ya lo advertían. La ley de amnistía no ha servido para iniciar una nueva etapa en Cataluña. "Tenemos el deber de intentar acordar un referéndum de autodeterminación. Es tan posible como lo era la amnistía y lo saben. Estoy dispuesto a una negociación, como lo estaba en 2017", decía desde Elna Puigdemont. Ahora bien, si no hay acuerdo, se compromete a convocarlo igualmente.
Vuelve Puigdemont, vuelve el Procés
El procesismo vuelve a la casilla de salida y lo hace gracias a Pedro Sánchez. Sin la ley de amnistía, Carles Puigdemont no sería candidato. Es más, el PSOE no dijo la verdad cuando aseguró que el acuerdo con Junts significaba un fin de ciclo, todo lo contrario. Si Cataluña retorna a 2017 y está a punto de vivir otra campaña marcada por el referéndum y el 'Espanya ens roba' es por las cesiones del presidente Sánchez.
Carles Puigdemont quiere monopolizar la campaña | ACN
"La gran lección de esta década perdida en Cataluña pasa porque Cataluña dividida no avanza, avanzará unida, y para eso hace falta un proyecto integrador, que sin reproches ni rencores apueste por la convivencia", decía ayer jueves Pedro Sánchez desde Bruselas. Decidió pasar de puntillas, sabedor que el discurso rupturista de Puigdemont le pasará factura.
Pedro Sánchez decidió priorizar Moncloa a mantener su "política de convivencia" en Cataluña. El discurso de este jueves de Carles Puigdemont revive el Procés, de eso no hay ninguna duda, y desviará la campaña hacia la restitución o no del de Waterloo. Todo lo demás, lamentablemente, quedará en segundo lugar. Esta es la nueva etapa que prometió Pedro Sánchez.
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