Tossa de Mar, en Girona
POLÍTICA

La ONG que gestiona la llegada de ilegales a Tossa recibió 14 millones en subvenciones

La última memoria económica que ha hecho pública esta ONG es la del año 2017

Una de las noticias más importantes de esta semana se sitúa en la pequeña localidad gerundense de Tossa de Mar. Este lunes, sabíamos que el Gobierno central iba a enviar a 200 inmigrantes irregulares a esta población. Esto desató la polémica y no pocos comentarios políticos.

La razón de fondo de la polémica es que se trata de un pueblo de 6.000 habitantes, con lo que recibir a 200 inmigrantes es el equivalente a que Barcelona recibiera de pronto a cerca de 54.000 personas.

Según el alcalde de Tossa de Mar, Martí Pujals (Junts), el número de inmigrantes es “excesiva” e inconveniente porque la localidad todavía está en temporada turística. El alcalde denuncia que Blanes, por ejemplo, ha acogido la misma cantidad de inmigrantes y cuenta con una población ocho veces mayor que la de Tossa de Mar.

Playa de Tossa de Mar, en Girona

En cualquier caso, el alcalde no se puede negar a este reparto y ya ha adelantado que los inmigrantes  se alojarán en un hotel de la región. En teoría, estarán alrededor de un mes, mientras se estudia cada caso de manera individual. Aunque el Ministerio de Inclusión, Seguridad Social y Migraciones no sabe si se extenderá más tiempo.

El papel de las ONGs en la inmigración irregular

En toda esta situación, la ONG APIP-ACAM tendrá un papel muy destacado. Esta ONG será la encargada de gestionar la estancia de los inmigrantes y la reubicación, o el reagrupamiento familiar, de los solicitantes de asilo, según adelantó Crónica Global.

De un tiempo a esta parte, las ONGs que trabajan con temas migratorios reciben cada vez más críticas. Para muchos, las ONGs son cooperadores necesarios en todo el proceso migratorio irregular, que, como es sabido, involucra también a las mafias ilegales y a la corrupción en los países de origen.

Un grupo de personas, incluyendo miembros de la Guardia Civil y de la Cruz Roja, se encuentran alrededor de un autobús.

Por lo general, estas ONGs son contratadas por las autoridades políticas para gestionar casos como el de Tossa de Mar. Es decir, para gestionar todo lo que involucra la llegada de irregulares: acompañamiento y asesoramiento, transporte, servicios de traducción, atención médica, etc.

Aunque sean organizaciones privadas, en su mayoría dependen por completo de la financiación pública. En este sentido, la ONG de Tossa de Mar, APIC-ACAM, no es una excepción.

Cuentas desactualizadas

Según los datos ofrecidos en su página web (bastante antigua), la ONG recibió 14 millones de euros en concepto de subvenciones e ingresos públicos, lo que representa casi el 90% de sus ingresos.

Como también es habitual cuando se trata de grupos privados financiados con dinero público, el gasto mayoritario es en personal, que en el caso de APIP-ACAM alcanza los 10 millones de euros, que representa el 66% de los ingresos.

En cualquier caso, lo más destaco de estas cuentas auditadas es que son de hace siete años. Dado el alto nivel de ingresos que maneja esta organización y la importancia que ahora tiene el debate migratorio, resulta llamativo que la web esté tan desactualizada y los datos de transparencia sean del año 2017.

➡️ Política

Más noticias: