Mujeres separadas por vallas de los hombres: así celebran el fin de ramadán en Lérida

Los musulmanes celebran este miércoles su fecha más señalada, el Eid al-Fitr, que marca el final del ramadán. La celebración ha dejado una imagen inquietante en Lérida, donde las mujeres han sido separadas de los hombres por unas vallas de construcción. La foto, difundida por el periódico El Segre, ya está circulando por las redes sociales ante la indignación mayúscula de muchos catalanes.

Hablan de trato denigrante a las mujeres, y lo ven como la demostración de que el islam es incompatible con los valores occidentales. Una afirmación por la cual la alcaldesa de Ripoll fue multada con 10.001 euros por la Consejería de Igualdad y Feminismos que dirige Tània Verge. Ahora piden a la consejera que sancione a los responsables de esta segregación que pone en riesgo la igualdad entre hombres y mujeres.

Según desvela El Segre, la imagen corresponde a la celebración organizada al aire libre, en el Parce de la Mitjana, por la comunidad islámica Shura. Los líderes de la comunidad han justificado el enjaulamiento de las mujeres, afirmando que no se trata de una imposición religiosa, sino de una costumbre ancestral. Según dicen, la ley islámica solo impone que las mujeres recen detrás de los hombres porque de lo contrario la oración no sería tan pura.

El doble rasero de la izquierda

El Govern de ERC y la Consejería de Igualdad y Feminismos han sido muy criticados por su doble rasero con la igualdad y la inmigración. Por un lado predican la igualdad y gastan cantidades ingentes de dinero público para su fomento, y por otro callan ante imágenes como esta que denigran a la mujer de una forma preocupante. La izquierda se escuda en el respeto a las tradiciones, aunque Esquerra felicita con especial vehemencia el ramadán mientras que silencia las festividades cristianas o les cambia el nombre como hizo con la Navidad (solsticio de invierno).

Además, acusan a los críticos con estas imágenes de utilizar el feminismo para ejercer la islamofobia. El doble rasero se demuestra con la decisión de la concejal de feminismo de Lleida, Sandra Castro (ERC), de suprimir las pubilles catalanas por considerarlas una figura anticuada. Ahora los leridanos recuerdan aquella decisión, y se preguntan por qué unas tradiciones sí y otras no.

Preguntas interesantes

El usuario de Twitter @moltsorrow (Auberge) lanza una serie de preguntas muy interesantes que nos tendrían que hacer reflexionar: ¿Todo esto es nuevo, o hace años que se hacía y no se decía? ¿Está viniendo gente más radical, se están radicalizando aquí? Y las vallas, ¿las proporciona el ayuntamiento, la consejería, piden permiso?