Vídeo: La bronca entre Vox y PSOE-Sumar que deja en mal lugar a Francina Armengol
La presidenta del Congreso de los Diputados ha actuado con falta de imparcialidad
El debate sobre la amnistía en el Congreso de los Diputados ha provocado una monumental bronca entre los diputados de Vox y la bancada de la izquierda. Quien peor parado ha salido ha sido la presidenta del Congreso, Francina Armengol, a quien acusan de doble rasero a la hora de imponer el orden y amonestar a los diputados. La presidenta habría faltado así a uno de sus principales deberes asociados a su cargo, que es el de la imparcialidad.
Todo ha empezado cuando el diputado de Sumar Gerardo Pisarello ha pedido la palabra a la presidenta por alusiones a su persona tras la intervención de Santiago Abascal. “Me siento orgulloso de ser catalán y latinoamericano, los que trabajamos y vivimos aquí no aceptamos lecciones de señoritos que rinden pleitesía al carnicero de Rafah”, ha espetado. José María Figaredo, de Vox, ha pedido la palabra “por alusiones a diputados de nuestro partido”, pero en este caso la presidenta se la ha negado.
El doble rasero de Armengol ha provocado gritos de “fuera, fuera”, pero lejos de rectificar ha acusado a los diputados de Vox de “mala educación”. La presidenta del Congreso ha pedido “respeto a esta cámara, a la democracia y a los ciudadanos que nos están escuchando”. La tensión ha ido a más, con acusaciones cruzadas entre diputados de Vox y del PSOE y Sumar.
Los diputados de Vox han llamado “traidores” y “corruptos” a los de la izquierda, mientras que desde la bancada socialista y sus socios se han escuchado gritos de “fascistas”. La presidenta del Congreso ha llamado al orden solo a los diputados de Vox, por insultar a los de la izquierda. En el uso de su palabra, el diputado socialista ha llamado “neofascistas montaraces y cerriles” a Vox, y de propina “filonazis”.
Francina Armengol no solo no ha afeado las palabras de Rallo sino que le ha interrumpido para aleccionar a los de Vox: “Ser demócrata implica saber escuchar al que piensa diferente”, ha dicho dirigiéndose a los de Abascal, “pido el mismo respeto para todos y para todas”. Su falta de imparcialidad ha indignado a muchos españoles que han criticado a la presidenta del Congreso en las redes sociales.
Feijóo sale en defensa de Vox
En el uso de su palabra, Alberto Núñez Feijóo ha salido en defensa de Vox afirmando que “yo no vengo aquí a llamar neofascistas ni filonazis a nadie”. El líder popular ha pedido al PSOE “no llamar convivencia” a la amnistía y “no reírse de los españoles”. Ha acusado a los socialistas de “vender a los españoles” y a convertir a la mayoría en ciudadanos de segunda.
Santiago Abascal y Alberto Núñez Feijóo, alejados en muchas cosas, en este caso han coincidido en señalar la amnistía como "corrupción". Según Abascal, " se cierne una sombra de sospecha de corrupción sobre el Gobierno, el partido y la familia del presidente". Ha recordado que "lo que quieren amnistiar es un golpe a la Constitución que rompió la convivencia y provocó la fuga de empresas y empobreció a los catalanes".
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