Primer plano de Ignacio Garriga de Vox muy sonriente

POLÍTICA

Recado de Vox a Junts tras su giro con los inmigrantes delincuentes reincidentes

'La realidad acabará imponiéndose'

Los alcaldes de Junts per Catalunya en el Maresme han roto el debate de la inmigración en el espacio procesista. Los ediles han mostrado su apoyo a Marc Buch, alcalde de Calella, que pidió la expulsión de los inmigrantes irregulares con delitos acumulados. Algo que desde la izquierda les pone al mismo nivel que la extrema derecha.

Durante muchos años, el independentismo se jactó de estar libre de este tipo de discursos, más propios de la derecha española recalcitrante. La aparición de Aliança Catalana rompió todos los esquemas. Ahora, Junts, en la órbita del procesismo, asume también la necesidad de mano dura contra la inmigración.

Ignacio Garriga, secretario general de Vox, ha mandado un claro mensaje a Junts tras su giro con los inmigrantes delincuentes reincidentes. “El separatismo ha criminalizado a Vox por defender la expulsión de quien hace del delito su forma de vida”, ha recordado. Y también que “eso nos ha valido cordones sanitarios”.

Para Garriga, “la realidad acabará imponiéndose, y nosotros podremos decir con la cabeza bien alta que siempre actuamos con responsabilidad”. Vox saca pecho porque considera que Junts ha acabado entrando en su terreno. Y que poco a poco lo que antes se estigmatizaba como extrema derecha ahora se va considerando de sentido común.

Algo está cambiando

La aparición de Aliança Catalana marcó una línea divisoria entre el independentismo identitario y el procesismo representado por Junts, ERC y CUP. Una división marcada por la estrategia para llegar a la independencia. Pero también, y sobre todo, por el discurso contra el buenismo y las políticas woke.

ERC y CUP siguen enrocados en sus posiciones, pero en Junts esta cuestión ha acabado abriendo un cisma. Una parte de Junts ya se rebeló contra el cordón sanitario a Sílvia Orriols tras su victoria en Ripoll el pasado 28 de mayo. Ahora, los alcaldes del Maresme se rebelan contra una situación insostenible.

Foto de los alcaldes de Junts del Maresme juntos mostrando su apoyo a Marc Buch, alcalde de Calella, el miércoles, 13 de diciembre

“Si no han venido a integrarse y a trabajar como hace la mayoría de la población, no tienen cabida en nuestra casa”. Son las palabras del alcalde de Calella, Marc Buch, respaldadas por el resto de alcaldes de Junts en el Maresme. Buch reclamó cambios legales para luchar contra la multirreincidencia y contra las ocupaciones.

Unas palabras hasta hace poco impensables en Junts per Catalunya. Pero dentro de la formación postconvergente hay cada vez más voces que piden recuperar aquello que convirtió a Convergència en el partido del orden en Cataluña. Es decir, cada vez hay más reticencias a la moda woke que representan ERC y la CUP.