Menos independentistas y más de derechas: así son los jóvenes catalanes

¿Y si resulta que, al final, el procesismo y el independentismo del país donde se comerá 'gelat per postres cada dia' se curan con el tiempo? 

Una reciente encuesta elaborada por el Centre d’Estudis d’Opinió (CEO) parece confirmarlo. ¿Por qué? Pues porque, según ese oficialista organismo estadístico, los jóvenes de entre 16 y 26 años son “los menos independentistas y los más de derechas”.

El feminismo vinculado a la teoría queer tampoco les interesa

También, y así lo indica el citado estudio, el neofeminismo vinculado a las teorías queer que defienden Irene Montero y sus conmilitonas tampoco interesa demasiado a esta franja de edad. Están, de hecho, incluso menos interesados en movilizaciones de ese tipo que la gente mayor. El estudio se ha elaborado entre 6.520 personas.

¿Qué edad tienen los procesistas 'de pedra picada'?

Al parecer, y si tenemos que hacer caso de lo que dice el CEO, los más entusiasmados con las jugades mestres de Mas, Puigdemont, Junqueras y otros primeras espadas nacieron entre 1946 y 1964. Un vistazo a las últimas manifestaciones permite constatar que así es: los años cotizados que suman los asistentes a las enésimas marchas definitivas –tanto da el signo- suelen siempre ser muchos.

Con todo, la condición de organismo público obliga a ello, el CEO hace una lectura voluntarista de los datos. Así, y del mismo modo que reconoce que ni los más jóvenes ni los más mayores –los nacidos antes de 1946- tienen interés en una eventual Cataluña independiente indica también otra cosa. ¿Cuál? Pues que un 34% de los nacidos entre 1946 y 1964 y un 32% de los nacidos entre 1965 y 1980 sí que verían con buenos ojos ese horizonte.

Sin embargo –y ahí se ve el voluntarismo- obvian el enorme elefante que llena la habitación. Si, como media, un 33% de los nacidos entre 1946 y 1980 sí quieren la independencia de Cataluña, es porque un 67% está más por otras cosas.

Por si fuera poco, hay otro dato: un 22% de los jóvenes con entre 16 y 26 años se declara de derechas. Puigdemont haría bien en empezar a rebajar sus exigencias porque los datos sociodemográficos dejan claro que nunca se le volverá a presentar otra oportunidad así.