Les 'Magues de Gener' vuelven a Altafulla esta Navidad
Visitarán a los niños de la localidad el 2 de enero con el lema 'Libertad, Igualdad, Fraternidad' bajo el brazo
Este año ha vuelto con fuerza el debate sobre mantener las tradiciones navideñas o cambiarlas para adaptarlas a los nuevos tiempos. En varias localidades catalanas están desapareciendo los pessebres, la decoración con figuras religiosas e incluso los Pastorets. Los Tres Reyes Magos tampoco se libran de la obsesión woke.
La localidad de Altafulla recupera este año la revolucionaria visita de las Tres Magas de Enero a los niños de la localidad. Las tradicionales figuras no solo cambian de género, sino que también pierden el título de reinas.
Se trata, según el gobierno municipal de ERC, de reivindicar los valores republicanos. Las Magas de Enero visitarán a los niños de Altafulla el 2 de enero con el lema Libertad, Igualdad y Fraternidad bajo el brazo. El consistorio defiende que es "otra manera de celebrar las fiestas" desde "una perspectiva laica, exenta de clases y sin una finalidad dogmática".
La tradición se remonta al año 1937, cuando en plena guerra civil española Valencia impulsó la Fiesta de la Infancia con tres magas. Ahora las magas vuelven a Altafulla para revelar "una nueva manera de celebrar el solsticio de invierno".
ERC celebra el solsticio de invierno... y el ramadán
No es la primera vez que ERC siembra la polémica con las celebraciones navideñas. El año pasado, el gobierno de Pere Aragonès felicitó el solsticio de invierno y las fiestas a los catalanes, pero evitó decir la palabra Navidad. En cambio, semanas después sí felicitó el "ramadán" a los musulmanes de Cataluña.
Esto provocó una gran indignación por la obsesión de este partido de desmantelar las tradiciones locales y fomentar las costumbres ajenas. Esto se está trasladando también a los barrios y municipios. En el Raval ya no hay decoración navideña sino luces multiculturales, y un colegio de Berga ha dejado de hacer los Pastorets para no molestar a otras religiones.
En muchas localidades cosas tan tradicionales como la Cabalgata de los Reyes Magos ya no es reconocible. Un acto que durante muchas generaciones ha traído magia e ilusión a los hogares catalanes, sobre todo para los más pequeños.
La tradición se basa en las Santa Escrituras, que recogen el viaje de tres eruditos hacia Belén para rendir pleitesía a Jesús recién nacido. Los tres reyes magos llevaban oro, incienso y mirra como presente. El 6 de enero reparten regalos por las casas de los niños y niñas en una noche de magia, ilusión e inocencia.
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