La justicia obliga a la Generalitat a dar más clases en castellano en la escuela
El gobierno de Pere Aragonès vuelve a recibir un revés judicial
Este lunes, 6 de noviembre, se ha hecho pública una nueva sentencia del Tribunal Superior de Justicia de Cataluña (TSJC) que aumenta las horas de castellano en las aulas catalanas. Hace apenas dos semanas se hacía público que el TSJC obligaba al colegio Turó del Drac, de Canet de Mar, a impartir una asignatura troncal en castellano.
La historia se repite. Pues, este lunes, el Tribunal ha ordenado que en un centro del Prat de Llobregat, en Barcelona, también se imparta al menos una asignatura más en castellano. De este modo, el Tribunal confirma la medida cautelar que ya tenía concedida en el centro.
En este caso, una familia del centro pidió al Tribunal que ordenará impartir un 25% de las horas lectivas en castellano. Tras tener la sentencia concedida como medida cautelar, el TSJC ha confirmado la decisión.
Ha sentenciado que la escuela tendrá que impartir en castellano, además de la asignatura de lengua, "otra área, materia o asignatura no lingüística curricular que, por su importancia en el conjunto del currículum y su carga lectiva, pueda ser considerada como principal".
Asimismo, a pesar de que el Tribunal no puede utilizar parámetros porcentuales, pues, si no irían en contra de la nueva normativa del Govern de la Generalitat, ha reconocido que el menor tiene derecho a recibir educación en castellano, mientras siga escolarizado en el sistema educativo catalán.
Anna Simó carga contra el TSJC
Ante la sentencia del Tribunal, la consellera d'Educació, Anna Simó, ha expresado su rechazo. "El TSJC ha vuelto a sentenciar contra el sentido común de la pedagogía, esta vez forzando más horas de castellano a un grupo clase de una escuela de El Prat de Llobregat. Nos defenderemos delante de todas y cada una de sus injerencias", ha sentenciado.
Sin embargo, se trata, pues, de un nuevo episodio donde queda demostrado que el "blindaje del catalán en las escuelas", del que tanto han hablado las autoridades catalanas, queda en nada. De este modo, se vuelve a confirmar que el Govern, al contrario de lo que dice, no ha logrado blindar el catalán en las escuelas.
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