Aitor Esteban en un acto electoral del PNV en Vitoria el 9 de julio de 2023
POLÍTICA

Junts-PNV, el tándem que vuelve por Navidad

La alianza conservadora tensiona el Gobierno de Pedro Sánchez

La reunión entre Andoni Ortuzar y Carles Puigdemont en Waterloo, el pasado 15 de septiembre, culminó la reconciliación entre Junts per Catalunya y el PNV. Algo muy importante, por ejemplo, en los equilibrios internos de la nueva coalición de gobierno. Pero también en el giro conservador de Junts y su competencia con ERC en Cataluña.  

La tradicional alianza entre nacionalistas conservadores catalanes y vasco se rompió en las jornadas de octubre de 2017. El PNV medió para que los independentistas renunciaran a la declaración unilateral de independencia. Lo cual fue visto como una traición por Puigdemont cuando el gobierno del PP acabó imponiendo sin piedad el 155. 

Composición fotográfica con los líderes de los partidos que dan apoyo a Pedro Sánchez

La restitución de las relaciones entre Junts y PNV reconfiguran los equilibrios ideológicos en la coalición de Gobierno. Si la anterior legislatura estuvo marcada por el peso de Podemos y la influencia de ERC y Bildu, en esta las cosas han cambiado. Sumar arrastra la izquierda hacia el centro, y el PNV y Junts reactivan el polo conservador.

Giro conservador en el Gobierno

La restitución de la alianza Junts-PNV tiene mucho que ver con el giro conservador de los de Puigdemont. Con el acuerdo de investidura, Junts abandona la confrontación y vuelve a la estrategia de la negociación. El partido recupera así el gen convergente que siempre fue partidario de hacer política en Madrid.

Pero la redefinición estratégica del partido va más allá del eje nacional, y entra de lleno en el espectro ideológico. Junts está en el Gobierno de Pedro Sánchez por conveniencia. Pero mientras espera la amnistía y el referéndum tendrá que participar en las leyes del Gobierno, por ejemplo en materia fiscal y económica.

En este ámbito se acerca más a los posicionamientos del PNB, cuyo aislamiento le obligaba hasta ahora a aceptar las leyes de la izquierda. Con Junts tiene ahora un nuevo aliado para imponer un giro conservador en el gobierno. De hecho, jertzales y postconvergentes podrían incluso votar puntualmente con el PP.

Elecciones en el País Vasco y Cataluña

Hay otro factor a tener en cuenta, y es que el PNB se encuentra en plena lucha electoral con EH Bildu. Esto obliga al partido de Andoni Ortuzar y Aitor Esteban a marcar su perfil derechista frente a la izquierda independentista. El giro conservador del PNV coincide así con el viraje a la derecha de Junts per Catalunya.

La alianza Andoni Ortuzar-Carles Puigdemont quiere neutralizar la alianza Arnaldo Otegi-Oriol Junqueras para una doble lucha. Por un lado, la batalla izquierda-derecha en el Gobierno y el Congreso de los Diputados. Y por otro lado, las batallas electorales en el País Vasco y en Cataluña.

En cuanto a las elecciones catalanas, Junts está dando evidentes síntomas del giro conservador, por ejemplo con el tema migratorio. El objetivo es plantear cara a ERC, y para ello necesita, igual que el PNV con Bildu, presentarse como el partido del orden. De ahí que postconvergentes y jertzales se necesiten ahora más que nunca.

➡️ Política

Más noticias: