Junqueras no tiene bastante con la amnistía
El líder de ERC deja claro que el objetivo final es la autodeterminación
El presidente de Esquerra ha lanzado el mensaje este fin de semana a través de La Vanguardia: con la amnistía no es suficiente. Junqueras, en efecto, ha aprovechado una entrevista en este diario para dejar claro que “no es el punto final” sino la línea de salida y que el objetivo último es la autodeterminación.
En La Vanguardia han tenido la gentileza de hacerle la entrevista en un paisaje bucólico -el jardín de su casa en Sant Vicenç dels Horts- pero al menos no sale columpiando a su hija. Como hicieron el 27 de junio del 2021 en la primera entrevista tras salir de la cárcel.
Entonces salía dando imagen de ‘padrazo’. Los lectores debían preguntarse: ¿cómo han sido capaces de meter a este hombre en la cárcel?
La elección del momento, dos días antes de que Puigdemont fije en Bruselas las condiciones para la investidura, tampoco es baladí. Desde los inicios del proceso, Esquerra y Junts mantienen una carrera para marcar perfil.
Junts confía que su posición firme ante Sánchez le sirva para recuperar el terreno perdido en las elecciones al Parlament fijadas para dentro de dos años -si no son antes-.
No en vano se han quedado sin Govern, sin Diputación y sin Ayuntamiento de Barcelona. Los ingresos oficiales del partido dependen ahora del Parlament y del Congreso de los Diputados vía grupo parlamentario.
Junqueras, en la citada entrevista, saca pecho también por “suprimir el delito de sedición y modificar el de malversación” pero insiste en la existencia de “presos políticos” y “exiliados”.
También insiste que la amnistía es “el punto inicial” y “condición necesaria” para la negociación. Además, considera el referéndum “imprescindible”.
El líder republicano excluye de la eventual medida de gracia a los policías encausados por las cargas policiales porque, a su juicio, actuaron “con brutalidad” y han cometido “un delito”. “Lo que es delito es apalear a los votantes”, subraya.
Oriol Junqueras es consciente -al igual que los periodistas- que una amnistía sería recurrida ante el Tribunal Constitucional, pero que la actual “mayoría progresista” facilitaría las cosas.
Sánchez designó al exfiscal general del Estado con Zapatero, Cándido Conde-Pumpido, para el órgano judicial y al exministro de Justicia Juan Carlos Campo, que tramitó los indultos. Pumpido ha llegado a presidente del alto tribunal.
El líder de ERC, en todo caso, se autoenmienda porque el independentismo siempre defendió que el referéndum del 1-0 era válido y que solo había ahora que “implementar” la República, pero han cambiado de opinión tras las condenas de cárcel y ahora habría que volver a votar.
No son, por otra parte, las únicas voces que se han levantado a favor de la amnistía este fin de semana en Cataluña. Jaume Asens, designado portavoz de las negociaciones por Sumar, ha afirmado por su parte que “sería positivo que un líder estatal interlocutara directamente con Puigdemont en Bélgica” a pesar de que el expresidente está buscado por la justicia y con la inmunidad suspendida.
En otra entrevista, en este caso en el diario Ara, próximo a Esquerra, afirmaba sobre las citadas negociaciones que “se están fijando las bases para la negociación, estamos en fase preliminar”.
En su opinión la amnistía serviría para “poner el contador a cero, para pasar página de una serie de eventos que no deberían haberse producido”.
Pero insiste que “sería un gesto de distensión y normalización hacia Junts que hubiera una interlocución directa con el presidente en Bélgica. Si es un interlocutor legítimo, es también su líder democrático”.
“Sería positivo que se fuera directamente a interlocutar. Ningún líder estatal ha estado con Puigdemont, mientras que Sánchez y Junqueras se vieron en el Congreso”, reitera.
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