Policía detiene a una persona
POLÍTICA

La indignación de un padre tras un atraco a punta de navaja en Hospitalet

Los usuarios se lamentan ante la degradación social de Cataluña durante los últimos años

Las redes sociales son el gran altavoz ciudadano. Gracias a ellas, conocemos toda clase de episodios vinculados a la inseguridad y el incivismo, temas clave en Cataluña. Y en algunos casos, las redes sociales se han adelantado a las declaraciones y acciones políticas.

Ahí están los casos del barrio del Raval o de los supermercados ‘paquis’ 24h. Después de mucho trabajo de ciudadanos y vecinos, las instituciones admitieron la existencia de problemas en estas áreas. El caso del Raval es evidente, con una degradación social acumulada que convierte la convivencia vecinal en un infierno.

Agentes de Mossos d

El último ejemplo en hacerse viral ha ocurrido en Hospitalet de Llobregat y lo denuncia un padre. Según explicaba ayer este padre, “acaban de sacarle una navaja a mi hijo, en l'Hospitalet de Llobregat a las 8 de la tarde, para robarle el dinero y el móvil”. Acto seguido, se lamentaba por el “país que estamos haciendo” y señalaba que “no sé si se puede decir, pero era un magrebí de unos 30 años”:

Este mensaje ha tenido mucha circulación, con cerca de 24.000 visualizaciones y más de cien comentarios. La indignación entre los usuarios a propósito de la inseguridad no hace más que aumentar. “Es una pena lo que han hecho con Cataluña”, “Espero que tu hijo esté bien, estamos haciendo un país de mierda...”, se lamentaban los usuarios.

La cuestión de la seguridad

Detener el aumento de las armas blancas es una de las prioridades de seguridad del actual Govern. Es el conocido como Plan Daga y tiene como objetivo controlar la proliferación de la “cultura de la navaja”, como lo denominó Albert Batlle. De hecho, la incautación de armas blancas y las detenciones han subido durante los últimos meses como consecuencia del Plan Daga.

Pero al margen de la cuestión policial, esta clase de episodios refuerzan el clima de inseguridad entre los ciudadanos, lo que acaba teniendo una traducción política. A falta del próximo barómetro oficial, los últimos datos del Ayuntamiento de Barcelona señalan que la seguridad es la primera preocupación de los barceloneses. Esto explica que la lucha contra la multirreincidencia y los robos con violencia haya pasado a primer plano del debate público.

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