Europa Press Ignacio Garriga, ante el gran reto de Vox en Cataluña
El líder catalán de la formación de Santiago Abascal afronta con optimismo las elecciones del 12-M tras su irrupción, hace tres años, en el Parlament
Ignacio Garriga liderará otra vez a Vox en las elecciones catalanas del próximo 12 de mayo. Tras la irrupción de su partido en el Parlament hace tres años, consiguiendo 11 escaños, el líder en Cataluña del partido de Santiago Abascal tiene ante sí un gran reto.
Nacido en 1987, dentista de profesión y con experiencia en la empresa privada, Ignacio Garriga empezó muy joven a interesarse por la política. Ya en 2005, con apenas 18 años, se afilió al PP. Partido del que se dio de baja en 2010 por discrepancias ideológicas.
Ese mismo año, se sumó a Alternativa de Govern, proyecto que impulsó la expopular Montserrat Nebrera. Sin embargo, esa iniciativa murió y, en 2014, se afilió a Vox. En el partido liderado por Santiago Abascal, Ignacio Garriga ha tenido un ascenso meteórico hasta convertirse en el vicepresidente nacional de la formación.
En 2019 fue el cabeza de lista de Vox por Barcelona en las elecciones generales. Posteriormente, se puso al frente del partido en Cataluña para ser candidato a las autonómicas de 2021, en las que Vox se convirtió en el partido constitucionalista con más fuerza gracias a los 218.000 votos conseguidos (y 11 escaños).
En los tres años que ha durado esta legislatura que ahora finaliza, Vox ha sido el partido que más iniciativas ha presentado (11.685), superando al resto de formaciones (el PSC es la segunda con 5.763). Y todo esto, a pesar del cordón sanitario que le han aplicado, sobre todo, ERC y Junts desde el Govern y desde la Mesa del Parlament, respectivamente.
Ahora, Garriga afronta las elecciones del 12 de mayo con el objetivo de seguir siendo el partido más votado del bando constitucionalista. No lo tendrá fácil, ya que todas las encuestas auguran una fuerte subida del Partido Popular de Alejandro Fernández. Eso sí, el éxito que pronostican para el PP no tiene pinta que sea a costa de Vox, ya que estos mismos sondeos muestran que los de Ignacio Garriga podrían mantener o solamente bajar tímidamente su representación en el Parlament.
A pesar de “competir” con Alejandro Fernández, no parece que Vox tenga la intención de rivalizar con el PP para conseguir el apoyo de los votantes constitucionalistas. Por ahora, su estrategia se está basando en confrontar a los partidos procesistas, a la vez que denuncian la connivencia del PSC con ellos y reivindican algunos de sus puntos fuertes ideológicos. Es decir, la lucha contra la inmigración ilegal y contra la delincuencia.
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