La guerra que no cesa: PP y Vox se alejan en plena crisis del PSOE

El escándalo de corrupción que afecta a las más altas instancias del PSOE deja al Gobierno de Pedro Sánchez pendiendo de un hilo. Los socialistas se han apresurado a cerrar un acuerdo con ERC y Junts para aprobar la amnistía, atar los presupuestos y dar estabilidad a la legislatura. La pregunta que se hacen muchos españoles es, ¿qué hace la oposición ante el peor momento de Pedro Sánchez desde que llegó a la Moncloa en 2018?

Vox y el PP han unido fuerzas en su denuncia del acuerdo sobre la ley de amnistía, pero la guerra por la hegemonía de la derecha sigue más viva que nunca. En los últimos días han estallado varias crisis en los gobiernos regionales y municipales donde gobiernan juntos. El PP reconoce abiertamente que la gobernanza con Vox “no es fácil”, mientras que los de Abascal no cesan en su empeño de señalarles como “la derechita cobarde”.

Ayer mismo, Vox instó al PP de Feijóo a “dejar de reunirse con el PSOE” y no tramitar la ley en el Senado. Los de Santiago Abascal han intensificado estos últimos días las críticas para evitar que el PP siga disparado en las encuestas. Por su lado, los de Feijóo apuestan por frenar la amnistía en los tribunales mientras ven crecer sus aspiraciones en las encuestas y empiezan a ver a Vox como un problema del que tienen que librarse.

Sube la tensión entre PP y Vox

Esta semana se ha conocido el acuerdo entre Vox y el PSOE para apartar al alcalde del PP en Arganda del Rey (Madrid). En el municipio murciano de Cieza, la coalición de derechas ha saltado por los aires al retirar el alcalde del PP las competencias de los tres ediles de Vox. En Valencia aumenta la tensión entre los dos partidos de gobierno por la eliminación de políticas activas de empleo dirigidas a las mujeres.

Los dos partidos tampoco se han puesto de acuerdo sobre la comisión de investigación por el ‘caso Koldo’ en el parlamento de las Islas Baleares. En el ayuntamiento de Huesca, Vox se ha alineado con el PSOE en varias mociones y el PP advierte de que la gobernanza con ellos es “muy difícil”. En Andalucía, Vox ha subido el tono acusando al PP de fomentar las políticas que hunden al sector agrario.

Las crisis abiertas en varios municipios y comunidades reflejan el recelo que aún existe entre ambos partidos. En Vox temen estar haciendo de muleta para que los populares amplíen su poder territorial mientras preparan su salto a la Moncloa. En el PP, que hasta ahora no veían más alternativa que la de ir con Vox, empiezan a ver a los de Abascal como un estorbo y estudian nuevas alternativas para formar una mayoría.

Acercamiento a Junts y al PNV

Lo cierto es que las últimas crisis internas han desgastado a Vox, y el partido de Abascal se está desinflando en las encuestas. Todo lo contrario que Feijóo, que está consiguiendo capitalizar la indignación contra la amnistía y el Gobierno de Pedro Sánchez. Los últimos barómetros señalaban hasta 163 diputados para el PP, que ya empieza a plantearse otras opciones para llegar a los 176 de la mayoría absoluta.

El PP podría explorar acuerdos con Junts y el PNV apoyado por otras formaciones como Coalición Canaria o UPN. El PNV ve al PSOE como culpable del ascenso de EH Bildu que ya acaricia el sorpasso en el gobierno en el País Vasco. Además, un sector importante del empresariado vasco lleva tiempo presionando para que el PNV bascule hacia el PP de Feijóo.

Lo de Junts sería más complicado, porque la amnistía ata los destinos de Puigdemont y de Pedro Sánchez, y porque el acercamiento causaría recelos en el electorado de derechas. Pero si Sánchez acaba cayendo, en Junts podrían empezar a plantearse un apoyo externo para que el PP gobernara sin Vox. Así, PNV y Junts podrían acelerar su giro a la derecha sobre todo en cuestiones económicas y de seguridad.