El Govern sale a defender las ‘okupaciones’

Con la intención de desmontar las “falsedades” de la “extrema derecha”, el conseller de Interior Joan Ignasi Elena ha salido en defensa de las ocupaciones. Elena ha desmentido que la okupación sea un problema, ya que “va a la baja”. Y ha diferenciado entre las ocupaciones sociales y las delincuenciales.

Así lo ha afirmado en un artículo en El Periódico. El conseller insta a combatir la okupación ligada a la delincuencia con mano dura, pero en cambio pide gestionar las “ocupaciones sociales” sin la actuación de la policía.

'El problema no existe'

Elena destaca que “en España y Cataluña las ocupaciones se han reducido prácticamente un 12% entre enero y abril”. Acusa a la “derecha y extrema derecha” de “manipular el debate de forma mezquina”. 

Pone como ejemplo el caso de la Bonanova de Barcelona, donde “no es que el problema haya desaparecido, sino que no existía”. “La realidad”, según Elena, “es que sólo 27 ocupaciones fueron en viviendas de uso habitual, mientras que 1.253 fueron en pisos vacíos”. 

Para el conseller, todo son “fake news” del “unionismo españolista”. Cita, por ejemplo, las declaraciones de Valents o Ciutadans sobre este tema. “Resulta paradigmático que ninguna de las dos formaciones haya obtenido representación, algo que les tendría que llevar a una profunda reflexión”.

Elena afirma que el año pasado un 97,7% de las ocupaciones fueron en viviendas vacías, y un porcentaje similar al de este año. “Además, cuando se produce una ocupación en un piso de uso habitual, la actuación policial es inmediata”, añade.

El conseller aporta otro dato: “Según el Centre d’Estudis d’Opinió (CEO) solo entre el 1,7% y el 2% de la población está preocupada por este tema”.

Okupaciones buenas y malas

Más allá de los datos, Elena diferencia entre dos tipos de ocupaciones. Por un lado, las “de carácter social, llevadas a cabo por familias vulnerables que no pueden acceder a una vivienda”. Afirma que estas ocupaciones son “muy mayoritarias”, y las justifica por “los fondos buitres que tienen miles de pisos vacíos de forma vergonzante”.

En su opinión, “la solución en estos casos tiene que ser social, no policial”.

Por otro lado, las okupaciones “ligadas a actividades delincuenciales, como el narcotráfico de marihuana”. Afirma que “hay que ser muy contundentes” con estas, y urge al Gobierno español a “liderar los cambios legales en este ámbito”.

“Aunque en porcentaje es claramente minoritaria, las okupaciones delincuenciales se tienen que combatir con toda la fuerza política, legal y discursiva”, dice Elena. Según él, “es inverosímil que tenga la misma pena una persona que pincha luz porque no la puede pagar, que alguien que lo hace para cultivar una plantación de marihuana”.