El Govern reconoce un problema con la inmigración en Cataluña
Tània Verge ha solicitado un reparto más equilibrado
De puertas hacia afuera, el Govern de la Generalitat pide no “generar alarma social ni alimentar la xenofobia” con la crisis migratoria. Pero a nivel interno existe una evidente preocupación. La Conselleria d’Igualtat i Feminismes ha pedido al Ministerio de Inclusión más recursos y una distribución “más equilibrada” para gestionar la llegada de inmigrantes desde las Islas Canarias.
La consellera Tània Verge ha solicitado un mayor apoyo a los municipios donde llegan más inmigrantes. La Generalitat ha planteado su preocupación por “el potencial tensionamiento de los servicios sanitarios y sociales”. Y por lo tanto, exige transferir más recursos tanto al Govern como a los entes locales.
En la reunión del ministerio con las comunidades, Verge ha pedido “reforzar la coordinación” y la “codecisión” en los territorios como Cataluña. La comunidad catalana ha sido una de las que ha recibido un mayor contingente de inmigración. Y pese al mensaje de tranquilidad que lanza el Govern, la situación genera cuanto menos inquietud.
Preocupación en el Govern
La Generalitat ha pedido al Gobierno central “tener en cuenta los contextos locales adonde llegan las personas”. Así, la administración catalana ve con preocupación la derivación de inmigrantes a municipios que comparten una misma región sanitaria. Esto pone en riesgo, según Igualdad, el buen funcionamiento de los servicios públicos.
Otra de las preocupaciones es el sustento de los inmigrantes en los municipios donde se albergan. El Govern ha planteado la necesidad de más recursos para garantizar sus necesidades básicas. Pero también la duda de qué pasará dentro de un mes, cuando finalice el plazo del programa de protección de estas personas.
Las oenegés y organizaciones que se dedican a la gestión de la acogida también han formulado está preocupación. Afirman que algunos conseguirán salir adelante, pero que habrá otros muchos que quedarán en la calle desamparados y sin perspectivas de futuro. Esto plantea un reto evidente para los gobiernos autonómicos y locales.
Sistema de reparto claro y transparente
La Generalitat ha formulado una petición al Gobierno central que un sistema de cuotas de reparto “claro y transparente”. Pide que el reparto obedezca a “criterios objetivos” que garanticen “un proyecto de vida digna” a los inmigrantes y solicitantes de asilo. Algo que evidencia que el problema no es baladí.
El Govern ya ha demostrado anteriormente un doble rasero entre su discurso sobre la inmigración y la gestión de la misma. Por ejemplo, negando un problema de seguridad mientras pone más patrullas y presenta planes de choque. Algo que coincide también con la percepción creciente en la sociedad de que realmente sí hay un problema.
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