Govern admite que ha aumentado el riesgo de ataques terroristas de 'lobos solitarios'

El consejero Elena ha explicado que se ha intensificado el riesgo de ataques por parte de lobos solitarios. Se trata de personas que actúan al margen de organizaciones terroristas, pero que están motivados por ellas. De hecho, los últimos atentados en Europa y en Australia muestran que la dinámica de los lobos solitarios se intensifica.

En declaraciones a RAC1, el consejero de Interior ha señalado que el riesgo de atentado terrorista se mantiene en el nivel 4. Y ha puesto el acento en que este riesgo ahora mismo no proviene de una red organizada. Por lo demás, ha apuntado a que el contexto internacional - la guerra en Gaza, fundamentalmente - “no ayuda”.

Aumenta la propaganda

Es lo que se denomina “yihad global”, que a todos los efectos es un llamamiento a que cualquier potencial terrorista haga la guerra por su cuenta. Se trata de una situación difícil de controlar y que exige máxima coordinación entre fuerzas policiales, un amplio trabajo de inteligencia y un control del mundo virtual.

Por el momento, el Ministerio del Interior ha dejado el nivel cuatro de alerta para todo el país. En Cataluña, la situación exige especial atención por tratarse de uno de los focos islamistas de España y de Europa. Los Mossos d’Esquadra lo tienen como una de sus prioridades y en los últimos meses hemos podido ver simulacros en estaciones de tren.

Como ha explicado hoy mismo el consejero Elena, el problema radica precisamente en que estos terroristas solitarios pueden actuar “con lo que tengan a su alcance”. Sin ir más lejos, la Audiencia Nacional ha decidido investigar el reciente ataque en un centro comercial de Badalona como un delito de terrorismo. El presunto terrorista atacó con un hacha dentro de una conocida cadena de comida rápida.

Así mismo, la propaganda en internet destinada a captar a estas personas ha aumentado. Algo que responde a la situación que se vive en la franja de Gaza. Esto actúa como un claro catalizador de personas susceptibles de radicalizarse y que residen en países europeos.