El gobierno de Sant Cugat de Junts y ERC ataca a Vox y queda retratado en 24 horas

El debate de la seguridad ha llegado a otro municipio de Cataluña, en este caso Sant Cugat. Allí, esta semana Vox ha señalado en una moción la incapacidad de los efectivos actuales de Policía Local para garantizar la seguridad ciudadana y ha propuesto la formación de patrullas vecinales. No es la primera vez que se plantea la creación de estos cuerpos ciudadanos para protegerse de la delincuencia en auge. 

Vox Sant Cugat ha pedido una mejora de las condiciones laborales de los agentes, el pago puntual de las horas extras y la puesta en funcionamiento de una nueva comisaría. Además, ha planteado organizar patrullas de cecina para “hacer labores de vigilancia con la colaboración de los recursos humanos y materiales de la Policía Local”. La propuesta fue rechazada por el resto de grupos municipales excepto el PP.

El alcalde saca pecho

La moción motivó los ataques de ERC y de Junts, que acusaron a Vox de “crear inseguridad y miedo en la ciudadanía”. En un artículo en la prensa local, el alcalde de ERC Bernat Picornell ha sacado pecho por los “buenos datos de seguridad” y “una reducción importante del número de delitos”.

Así mismo, ha reconocido problemas de incivismo y de convivencia en algunas zonas de la localidad. “Hemos reforzado la presencia de patrullas en estos puntos”, afirma, “pero la resolución de estos problemas se consigue también con la intervención de servicios sociales y un diálogo abierto con los vecinos”.

Quedan retratados

Pero ERC y Junts han quedado retratados con sus ataques a Vox. Apenas 24 horas después de acusarles de generar inseguridad se ha producido la muerte violenta de un hombre y la ocultación de su cuerpo en Sant Cugat. Lo cual ha provocado la indignación de los vecinos, que han pedido al alcalde que se ocupe la seguridad de las familias y los vecinos "y deje de engañar a la gente".

"Qué bonita ciudad nos está quedando", ha dicho irónicamente un vecino, "se respira una paz y una tranquilidad".

Viene siendo la tónica habitual de la izquierda y los partidos procesistas atacar a formaciones como Vox para ocultar el problema real de la inseguridad en los municipios. Como en el caso de Sant Cugat, la realidad acaba pasando por encima de estos partidos. Mientras se dedican a atacar a "la ultraderecha", la delincuencia campa a sus anchas y quienes sufren las consecuencias son los ciudadanos. 

Los vecinos están hartos

En el pleno municipal intervinieron los vecinos de La Floresta, una de las zonas castigadas por la inseguridad. La Asociación de Propietarios y Vecinos denunció el incivismo que sufren, “no solo un problema de seguridad sino también de convivencia, sanitario y social”. La situación se ha enrarecido estos últimos meses, sobre todo por la presencia habitual de una persona problemática que tiene a los vecinos atemorizados.

Desde la Asociación reconocen que se han llegado a plantear la organización de patrullas vecinales, pero apelan a la administración para que encuentren soluciones a este problema.