Un comedor escolar con mesas preparadas con platos y vasos de colores y una cesta de pan.
POLÍTICA

El Gobierno obligará a escuelas e institutos a ofrecer opción halal en los comedores

El Consejo de Ministros ha aprobado un decreto ley para una comida más saludable y sin discriminación

La polémica de la adaptación de los menús escolares a los alumnos musulmanes está cada vez más envenenada. Estos días, el ayuntamiento de Barcelona reconoció que no sirven cerdo en las guarderías por “una alimentación inclusiva”. El Gobierno español obligará ahora a los centros escolares a servir menús especiales para alumnos con diversidad religiosa. 

Mesa de comedor con vasos de plástico invertidos y cubiertos envueltos en servilletas, con sillas alrededor en un ambiente de comedor.

El Consejo de Ministros ha aprobado este martes un decreto ley sobre comedores escolares saludables y sostenibles. Es una medida del Ministerio de Derechos Sociales que dirige Pablo Bustinduy, ex de Podemos y ahora en Sumar. El decreto incluye varias directrices para una comida más saludable y sin discriminación en escuelas e institutos.

Establece por ejemplo la prohibición de la bollería industrial y las bebidas azucaradas, y más presencia de pescador, verduras y cereales. La polémica está en el apartado donde obliga a servir menús veganos y adaptados a la diversidad religiosa de los alumnos.

La medida será de obligado cumplimiento en todos los centros, ya sean públicos, privados o concertados. También afecta a todo el territorio español, incluida Cataluña. Aunque en los centros catalanes ya rige una normativa específica de comida saludable implementada por el Departamento de Salud catalán.

Qué pasa en cataluña

En Cataluña la normativa la marca el Decreto 160/1996 que regula el servicio escolar de comedor en los centros docentes públicos. La ley establece que los centros tienen que garantizar una alimentación saludable y adaptada a las características y necesidades de los alumnos. Pero no especifica la obligación de ofrecer menús especiales en función de la religión. 

Los centros con una alta presencia de alumnos extranjeros han ido adaptando de forma voluntaria la oferta alimentaria. Aunque en la práctica son los centros quienes deciden la oferta de acuerdo con el consejo escolar. En algunos lugares, como Barcelona, se han implementado directrices municipales para unificar los criterios.

Polémica en Barcelona

El ayuntamiento de Barcelona aprobó en 2016, bajo el gobierno de Ada Colau, la Instrucción sobre la diversidad alimentaria en los comedores de los centros escolares públicos. Esta directriz establece que:

Las empresas adjudicatarias de los servicios de comedor y las cocinas propias de los centros educativos tienen que garantizar la singularidad de los menús que pidan las familias por motivos culturales y religiosos. 

En el caso de que el número de diferentes menús dificulte de manera importante la gestión del comedor escolar, se tienen que buscar adaptaciones y ofrecer un máximo de cuatro menús que den respuesta a los colectivos con más representación.

A petición de varios usuarios, el ayuntamiento ha reconocido que no sirven cerdo en las guarderías de la red pública. El gobierno municipal se ampara precisamente en la Instrucción de 2016 para defender "una alimentación más inclusiva y adaptada a las realidades diversas de los alumnos". Lo cual muchos consideran una discriminación hacia los alumnos no cristianos.

➡️ Política

Más noticias: