Escuelas se organizan contra el Govern por el coordinador de convivencia y bienestar

Anna Simó llegó a Educación con ganas de dejar su propia huella. O eso parece. El departamento de Educación de la Generalitat de Cataluña creó a inicios de este curso escolar una nueva figura en los centros educativos catalanes: El coordinador de coeduación, convivencia y bienestar emocional. Se conoce popularmente como el COCOBE y cada escuela o instituto debía nombrar a uno de sus profesores para esta nueva responsabilidad. En un principio, la nueva tarea no tenía retribución alguna, pero a finales de octubre se comunicó que se destinaría una partida para que el COCOBE de cada centro tuviera un complemento en su sueldo.

Según Educación, estas son las cinco misiones del coordinador de coeducación, convivencia y bienestar emocional:

• Velar para que el proyecto educativo del centro incorpore los vectores de bienestar emocional, coeducación, ciudadanía democrática y conciencia global.
• Garantizar el respeto de todo el alumnado.
• Fomentar entre la comunidad educativa el uso de métodos de resolución pacífica de conflictos.
• Promover estrategias para la identificación de posibles situaciones de riesgo e impulsar las medidas de intervención.
• Dar a conocer y proponer actividades formativas dirigidas a la comunidad educativa sobre este ámbito.

Durante los dos primeros meses del curso escolar, el coordinador de cada centro recibió "formación" en este ámbito. En concreto, fueron unas jornadas sobre "el bienestar del alumnado y las situaciones de violencia". En estas sesiones estuvieron presentes los equipos directivos y los nuevos coordinadores. 

Críticas desde el inicio

El profesorado criticó desde el principio la nueva imposición del departamento. No solo porque en un principio se trataba de trabajo no remunerado, sino también porque se exigía al coordinador asumir tareas por las que no estaba formado ni preparado. Por ejemplo, cualquier clase de violencia en los centros educativos, que son ahora responsabilidad única del COCOBE. También todo lo relacionado con la educación sexual o los derechos LGTBI, que colgarían del coordinador.

Para paliar las críticas, la Generalitat aportó 3,9 millones de euros para que los 3.400 nuevos coordinadores tuvieran un complemento en su sueldo, pero que es irrisorio y no llega a los 150 euros mensuales. Es por todo esto que varias escuelas del Garraf se han organizado ya para plantarse contra Educación. Los docentes de estos centros aseguran que las obligaciones con el coordinador COCOBE son la gota que colma el vaso tras "muchos despropósitos de Educación". 

Según ha podido saber e-Notícies, la intención es poder manifestar en breve su hartazgo con la nueva exigencia de la Generalitat. Y cada vez son más las escuelas que se podrían sumar a este movimiento, ya que varios centros educativos del Penedès se podrían sumar. Estas escuelas aseguran que el profesorado no debe ejercer estas funciones, que no están formados ni preparados para lo que se les pide y de que la responsabilidad recae en quien ya tiene una carga elevada de trabajo.

Varios centros y docentes exigen a la Generalitat que la coordinación COCOBE debe ser asumida por profesionales y además con planificación y no con medidas que llegan por sorpresa en los centros educativos. De momento, son varios los centros del Garraf los que se están organizando para plantarse, pero serán más. Otro ejemplo más de la distancia enorme que hay entre el departamento de Educación y la realidad.