ERC y Junts se juegan dos millones en el Congreso
Por eso quieren tener grupo parlamentario propio pese a que no cumplen los requisitos
Esquerra y Junts se juegan más de dos millones en el Congreso durante esta legislatura. Por eso ambos partidos quieren tener grupo parlamentario propio. Pese a que, ni por número de escaños ni por porcentajes, podrían.
En efecto, La elección del presidente o presidenta del Congreso -y la elección de la Mesa- ha entrado en una fase de incertidumbre por las reticencias de Esquerra y Junts. ERC ha frenado su apoyo al PSOE para no quedar descolgado del partido de Puigdemont.
Pero, en realidad, lo que está en juego es la posibilidad de tener grupo parlamentario propio, más visibilidad en los plenos y unas subvenciones que superan los dos millones.
En caso contrario, quedarían diluidos en el Grupo Mixto, donde conviven, más mal que bien, diferentes partidos minoritarios, a veces con ideologías contrapuestas.
Si ERC y Junts no pueden intervenir con voz propia en cada pleno, se mostrará también claramente que, tras haber caído por debajo del millón de votos, el proceso va a la baja.
Por eso pretenden hacer ‘trampas’ con el reglamento de Congreso y alcanzar los requisitos mínimos para constituir grupo parlamentario.
Pero el reglamento es claro. El artículo 23.1 establece que podrán constituirse en grupo parlamentario aquellas fuerzas políticos que tengan un número “no inferior a quince diputados”.
El PSC, con 19, en teoría, sí que podría, pero dejó de tenerlo tras el intento de golpe de estado del 23-F. Esquerra y Junts, en cambio, no alcanzan la cifra requerida. Ambos solo obtuvieron siete diputados.
La otra opción es “el quince por ciento de los votos” en todas las circunscripciones presentadas, pero tampoco se da el caso. Esquerra se quedó, en total, en el 13,16% y Junts el 11,6%.
Por Barcelona ambos quedaron muy por debajo: ERC (12,33%) y Junts (9,68%)
En Girona, solo Junts (19,6%) mientras que Esquerra se quedó a las puertas (14,74%).
En Lleida sí porque ambos superaron el 18%. Finalmente, en Tarragona, los republicanos pasaron el límite por los pelos (15,07%) pero Junts se quedó lejos con el 11,08%. Les ganó no solo el PP, sino también Sumar.
La otra posibilidad es que un partido ‘ceda’ diputados en la constitución de la cámara. Ya pasó con Esquerra en el 2008. El artículo 27.1 del reglamento, en efecto, establece que “del cambio de un Grupo Parlamentario a otro, con excepción del Mixto, solamente podrá operarse dentro de los cinco primeros días de cada período de sesiones”.
El tema financiero es también importante. El régimen económico consigna una subvención de más de 30.000 euros mensuales para cada grupo parlamentario y de 1.700 para cada escaño obtenido.
En el caso de ser un grupo parlamentario de siete diputados -como sería el caso-, Esquerra y Junts obtendrían una subvención de más de 500.000 euros por cada período de sesiones, es decir, más de dos millones en cuatro años.
Por eso, los republicanos pusieron como condición una Mesa con presencia del “independentismo o del PNV”, como dejó claro la número dos en Madrid, Teresa Jordà, una de las negociadoras. Ahora han enfriado la reivindicación porque Junts se mantiene enrocada y no quieren dar imagen, a dos años de las autonómicas, que vuelven a ceder.
Por cierto, el Régimen económico fija que el presidente o presidenta de la cámara cobra 230.000 euros al año, el sueldo más alto de la política española, más incluso que el de presidente del Gobierno (90.000) o el presidente de la Generalitat (132.000).
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