Duro batacazo para Junts a una semana del inicio de la campaña electoral
Más problemas para el partido de Jordi Turull y Laura Borràs
Sigue la guerra interna en el espacio pujolista, donde Junts ha encajado una dolorosa derrota frente a CiU-PDeCAT a menos de un mes para las elecciones. La Junta Electoral Central da a los postconvergentes el 100% de los derechos electorales de la coalición Junts per Catalunya.
Esto significa que los recursos económicos y los espacios electorales de la marca serán íntegramente para el partido de Genís Boadella. En cambio, la formación de Carles Puigdemont, Jordi Turull y Laura Borràs se queda sin nada. Duro batacazo para los juntaires, a solo una semana de empezar la campaña.
Junts se enfrenta ahora a la pérdida de suculentas subvenciones para afrontar la campaña electoral. Un problema más, ya que sus perspectivas electorales se ven mermadas por la campaña abstencionista que promueve parte de sus bases.
¿Qué decía el acuerdo PDeCAT-Junts?
El conflicto nace porque PDeCAT y Junts concurrieron juntos a las elecciones generales del 10 de noviembre de 2019. El acuerdo establecía que “los derechos electorales que se generen como consecuencia de los resultados de la coalición en las elecciones corresponderán al PDeCAT en su totalidad”.
El acuerdo establecía también que “en las siguientes elecciones generales, tanto si PDeCAT concurre en solitario como en coalición con otros partidos, le corresponderá el 100% de los derechos electorales”.
Ahora, el partido cuya candidatura encabeza Roger Muntañola recibirá los recursos otorgados en función de los resultados electorales de 2019. Junts, en cambio, se queda sin nada.
Más de 21.000 euros por escaño
En las elecciones de 2019 PDeCAT y Junts concurrieron juntos, pero en estas lo hacen por separado. Por lo tanto, la justicia tenía que dirimir a quién corresponde el dinero y el espacio electoral de la candidatura de hace cuatro años. La Junta Electoral Provincial de Barcelona decidió repartir las ganancias al 50%, pero la JEC ha tumbado la decisión.
Esto es importante porque los partidos financian parte de sus campañas electorales con dinero público. La Ley Orgánica del Régimen Electoral General (LOREG) atribuye unas subvenciones en función de los resultados electorales obtenidos. En concreto, 21.167,64 euros por escaño obtenido en el Congreso y el Senado, y 0,81 euros por cada voto.
Guerra en el pujolismo
Esta es una batalla más por el control de la hegemonía del catalanismo conservador. Aunque PDeCAT y Junts hicieron una parte del camino juntos, sus diferencias programáticas llevaron a la separación. Solo algunas voces internas como Xavier Trias piden una reagrupación del espacio postpujolista.
Ambos comparten el principio independentista, pero PDeCAT se presenta como el partido de la centralidad y el sentido común. En cambio, Junts quiso superar la lógica del pujolismo radicalizando el nacionalismo y ampliando su espectro hacia la izquierda.
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