Un dirigente de la ANC se opone al cordón sanitario a Aliança Catalana
Explica que el procesismo está muerto y que es necesario resucitar el discurso independentista: 'fuego nuevo'
A medida que se desmorona el procés, el nacionalismo catalán va adquiriendo algunas dosis de realidad. La inminencia del pacto entre ERC y PSC lleva a muchos a reforzar la idea de que la independencia pactada con el Estado no es posible.
De la misma manera, cada vez hay más personas que no participan de la demonización de Aliança Catalana. Por el contrario, admiten que AC pone sobre la mesa temas centrales, como la inmigración. Al margen de que al fin y al cabo también es un partido indepe.
El coordinador de la Asamblea Nacional Catalana (ANC) de Manresa, Josep Maria Pintó, se ha expresado en unos términos parecidos a los anteriores.
En una entrevista para el diario Regió7, Pintó ha hablado sobre AC, la presidencia de Illa y el papel del independentismo en el futuro.
El fracaso procesista
Pintó empieza por constatar que el independentismo cotiza en horas bajas.
“Las personas están desmovilizadas y tenemos que hacer acciones para volver a engordar los engranajes”, explica, “Pienso que se tiene que hacer fuego nuevo, no nos podemos quedar estancados en esto”.
Para Pintó, el origen del fracaso procesista y su correspondiente desengaño social está en los pactos con el Estado. Tiene claro que negociar con el PSOE no acerca ni mucho menos a la independencia. Y en este error, insiste Pintó, también ha caído Junts.
“Tenemos muchos puntos en común, pero no podemos tolerar que[Junts]tambié haya pactado con el PSOE”, dice sobre el partido de Puigdemont.
A juicio de este coordinador de la ANC, lo único valioso que ahora tiene el independentismo es la experiencia (negativa) del procesismo. Es decir, las lecciones aprendidas.
Ahora bien, con respecto al futuro, Pintó no se sale de los lugares comunes. Pide “acciones de lucha no violenta”, no pactar con el Estado, buscar una estrategia nueva, etc.
AC y los cordones en el Parlament
Sobre el partido de Sílvia Orriols, Pintó también se ha salido del discurso del establishment. En esencia, dice dos cosas sobre AC.
La primera es que es un partido que acaba de nacer y que todavía busca su lugar. En este sentido, ve un partido que “todavía está demasiado tierno”. Ahora bien, esto no implica que los cordones sanitarios sean útiles. “Personalmente”, dice Pintó, “considero que los cordones sanitarios a Aliança Catalana son bastante ridículos y acaban generando un efecto contraproducente”.
Finalmente, explica que la inmigración es el tema estrella de AC ante la omisión que de él hacen el resto de partidos. “El problema es que es un tema que de alguna manera causa un conflicto social y no está en el centro del debate porque los partidos al gobierno no lo tratan por miedo, y esto es una irresponsabilidad”.
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