Mohamed Said Badaoui en una manifestación con banderas en el fondo.
POLÍTICA

Cataluña acoge un congreso islámico con ponentes machistas y acusados de salafismo

Se levanta la polémica por el perfil y las declaraciones de algunos de los participantes del Congreso Nacional Islámico

Los próximos 13, 14 y 15 de septiembre, Torredembarra acogerá el Congreso Nacional Islámico. Según explica la organización, el objetivo de este acontecimiento es “aprender, meditar y conocer la religión del islam”.

El congreso se lleva celebrando más de veinte años y esta última edición lleva por nombre “Creencias, usos, costumbres y familia”. Entre las actividades ofrecidas, se encuentran charlas abiertas al público. Por lo demás, este Congreso Nacional Islámico no estará exento de polémica.

El motivo es que, entre sus participantes más destacados, se encuentran figuras que han protagonizado agrias polémicas en el pasado. Algunas de ellas vinculadas a declaraciones misóginas, otras directamente vinculadas según la policía al salafismo y que, de hecho, provocaron la deportación de uno de los participantes en el Congreso.

Unas declaraciones de 2013

Uno de los ponentes será Malik Benaisa, que hace poco adquirió notoriedad en redes sociales por unas palabras que pronunció hace once años. En 2013, en una conferencia en la ciudad autónoma de Ceuta, este estudioso de la religión islámica hizo unas declaraciones machistas, que fueron retransmitidas por RTVE de Ceuta.

“Toda mujer que se perfuma y sale de casa paseándose delante de los hombres que huelen su perfume, esa mujer es una fornicadora”, dijo Benaisa en referencia a un hadit, un texto del profeta Mohamed:

En su día, el PSOE denunció a Benaisa por estas declaraciones y delegación del Gobierno presentó estas palabras  a la Fiscalía como prueba de un delito de apología de la violencia de género o la discriminación por razón de sexo. El Ministerio Público archivó la causa contra Benaisa al considerar que no había delito.

Un converso

Otro de los ponentes cuya presencia levanta la polémica es Yusuf Soldado. De origen catalán y exconfidente de la policía, Carlos Soldado cambió su nombre a Yusuf Soldado cuando se convirtió al islam.

Desde Mataró, se dedicó al proselitismo islámico bajo el paraguas de la Asociación Cultural Iqra. Acusado por vecinos musulmanes de intentar emular a la "policía de la moral", Yusuf Soldado protagonizó también algunas polémicas en su ciudad. Según una crónica del diario El Mundo del año 2019, incluso el resto de comunidades islámicas de Mataró lo consideraban a él y a su grupo demasiado radical.

“¿Cómo se van a permitir fiestas donde las mujeres van desnudas y se propaga la fornicación entre los jóvenes con la música que se oye por toda la ciudad y la gente va borracha y drogada? Los musulmanes que acudan están haciendo algo que no es propio de un buen musulmán”, dijo Yusuf en 2015 a través de redes sociales a propósito de las Fiestas de Les Santes de Mataró.

Imagen detalle de una chaqueta de los Mossos d'Esquadra

Así mismo, en 2015, Yusuf Soldado se vio inmerso en una guerra interna entre policía y mossos d’esquadra a propósito de la lucha antiterrorista. Como dijo él mismo en una entrevista anónima en El Periódico, le contactaron para “persuadir a la célula de Terrassa de sus ideas radicales antes de que los detuvieran y también conseguir ciertas informaciones de sus miembros”.

La polémica expulsión de Badaoui

En el Congreso también figura Mohamed Said Badaoui, que, por lo que parece, participará a través de redes sociales.  

En 2022, Badaoui saltó a la prensa por su orden de expulsión de España. Según la policía, Badaoui era “uno de los principales referentes en España del salafismo más ortodoxo”, así como el responsable del “aumento del radicalismo en la región de Tarragona a causa de su discurso”. Su deportación no estuvo exenta de polémica política.

Para algunos grupos políticos progresistas y organizaciones de derechos humanos, su expulsión fue injusta y respondía a una “represión política mediante la Ley de Extranjería”. Para la Audiencia Nacional, en cambio, que se basó en una denuncia de la Comisaría General de Información, primaba el interés general sobre el derecho de arraigo.

Badaoui está todavía inmerso en una guerra jurídica con la Audiencia Nacional. Con su abogado, el exdiputado de la CUP, Benet Salellas, Badaoui tiene recurridas la orden de expulsión del Ministerio del Interior y la denegación de la nacionalidad española.

➡️ Política

Más noticias: