El caso Rubiales o cuando la izquierda no defiende el feminismo
Irene Montero, Yolanda Díaz o Tània Verge no tratan por igual todos los casos de machismo
A estas alturas, pocos defienden ya Luis Rubiales. La Fiscalía ha abierto una investigación, la FIFA lo ha suspendido de sus funciones e incluso desde dentro de la Real Federación Española de Fútbol (RFEF) le han pedido que dimita. Además, el Gobierno promueve su destitución de la mano del Consejo Superior de Deportes.
La actitud que han mantenido algunos políticos respecto al caso Rubiales ha suscitado muchas críticas. Dirigentes como Irene Montero, Tània Verge o Yolanda Díaz han sido señaladas incluso desde dentro del movimiento feminista. Y es que su intento de instrumentalización del feminismo respecto a la polémica del beso a Jennifer Hermoso ha acabado dejando en evidencia a más de uno.
Podemos y Sumar, señalados
Quien se ha lucido estos últimos días ha sido, sin duda, Irene Montero. La ministra de Igualdad en funciones ha aprovechado el caso Rubiales para reivindicar su obra en el Gobierno. Cada publicación al respecto que ha hecho en redes terminaba con un “solo sí es sí”. Reivindicaban así la ley que promovieron y que permitió que más de 1100 agresores sexuales vieran reducidas sus condenas y más de 100 violadores pudieran salir de la cárcel.
Cualquiera diría que a Irene Montero le importaba más sacar pecho por la ley que impulsó que la propia polémica con el presidente de la RFEF. Su intento descarado de intentar sacar beneficio político del caso Rubiales ha sido incluso denunciado desde el movimiento feminista, destacando una dura crítica de la escritora Lucía Extebarría.
Pero su enemiga interna Yolanda Díaz tampoco se salva de las críticas. La ministra de Trabajo en funciones ha abanderado la lucha por la dimisión del presidente de la RFEF. De hecho, fue la primera en pedir su cabeza como jefe del fútbol español.
La líder de Sumar ha sido también muy criticada por una parte del feminismo, sobre todo el sector más cercano a Irene Montero. Siempre se ha hablado de la sororidad entre mujeres, pero cuando tuvo la posibilidad de apartar a ministra de Igualdad, no tuvo ningún reparo en “matarla” políticamente. Montero era quizás la única que podía hacerle un poco de sombra dentro de su nuevo partido y no dudó en marginarla de las listas, renegando así de legado político. Lo que no hizo Pedro Sánchez, ni la ley del Solo sí es sí, ni la ley Trans, lo hizo la misma Yolanda Díaz por tacticismo político.
Esquerra, los burkinis y el presidente del Puerto de Barcelona
Otro partido que se ha subido al carro de criticar a Rubiales ha sido Esquerra. El currículum antifeminista de ERC es extenso, pero esto no les ha impedido levantar la voz contra el máximo responsable del fútbol español por su comportamiento.
ERC, el partido que ha promovido los burkinis en las piscinas públicas de Cataluña o que tiene una diputada que defiende que no se debe castigar el uso de los burkas, ha salido a dar lecciones de feminismo esta semana. Sí, el mismo partido que ha colocado como presidente del Puerto de Barcelona a Lluís Salvadó, que decía que se deben dar cargos a aquellas mujeres “que tengan las tetas más grandes”.
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