Montaje de fotos de Carles Puigdemont en primer plano, con rostro serio, con las banderas de Cataluña (estelada) y España de fondo
POLÍTICA

Puigdemont pierde fuelle en Cataluña

Es el político más conocido pero uno de los peor valorados


Carles Puigdemont ha sido elegido como uno de los políticos más influyentes del año que viene por la revista Politico. Le colocan en segunda posición con el apodo de “el rebelde”. Todo un hito que sus incondicionales han utilizado para hacer propaganda del expresident en sus horas más bajas.

El propio medio advierte que si bien tiene una gran influencia en la política española, no está claro que le vaya a servir para conseguir el referéndum. De hecho, el honor de figurar en este ránking contrasta con el reciente barómetro del Centre d’Estudis d’Opinió (CEO). Puigdemont parece estar perdiendo fuelle.

Según el CEO, el líder de Junts encabeza el ránking de políticos más conocidos, ya que un 98% de los encuestados asegura saber quién es. Pero en cambio, es uno de los políticos catalanes peor valorados y no llega al aprobado. Está claro que sus últimas decisiones están pasando factura al otrora líder del procés.

Carles Puigdemont, muy mal valorado

El líder político más conocido en Cataluña es Carles Puigdemont (98%), seguido de Oriol Junqueras (95%), Pere Aragonès (85%) y Salvador Illa (81%). Pero el ránking de valoración lo encabezan Junqueras y Ernest Urtasun. A continuación vienen Míriam Nogueras, Pere Aragonès, Jèssica Albiach y Salvador Illa.

Hay que ir hasta la décima posición para encontrar a Carles Puigdemont, con un 4 de nota de valoración. Por delante suyo tiene a Carles Riera, Miquel Iceta y Laia Estrada. Y por detrás solo a Lorena Roldán, Jordi Cañas, Alejandro Fernández, Ignacio Garriga y Carlos Carrizosa.

Plano medio de Carles Puigdemont de pie detrás de un atril con un fondo azul en una rueda de prensa en Bruselas

Lo más preocupante para el expresident es que su popularidad ha caído sobre todo entre los suyos. El sí de Junts a la investidura de Pedro Sánchez desató la indignación del independentismo contra Carles Puigdemont. Ya le colocan a la altura de Junqueras y Aragonès como traidores y botiflers.

Peligra la estrategia de Junts

Más allá de la anécdota de las encuestas, el desgaste del expresident complica y mucho la estrategia de Junts para sobrevivir a la crisis procesista. Los postconvergentes confían en el “efecto Puigdemont” para darle la vuelta a las encuestas. Unas encuestas que reflejan un castigo del electorado independentista a ERC y Junts.

En Junts esperan que la vuelta de Puigdemont a Cataluña gracias a la amnistía ayude a recuperar su aura de líder intocable del independentismo. El partido ya prepara un regreso que se presentará como “histórico”, a la altura de la vuelta de Josep Tarradellas en 1977. Pero a la vista de su desgaste, no lo tendrá fácil.

Su partido ya está empezando a admitir que han renunciado a la vía unilateral para explorar el referéndum acordado con el Estado. Esto ahonda en la sensación del independentismo de que los partidos han traicionado a las bases. Cada vez son más las voces que piden una renovación y nuevos liderazgos.

Una encrucijada difícil

La elección de Puigdemont como uno de los políticos más influyentes de Europa explica de hecho el ocaso de su liderazgo. El expresidente ha vivido muy cómodo en la estrategia de la confrontación, sin más tarea que la de seguir alimentando el mito del “exilio”. Pero cuando las circunstancias le han situado en la posición de tener que tomar decisiones, su firmeza se ha empezado a resquebrajar.

Montaje con tres planos medios de Laura Borràs, Carles Puigdemont y Jordi Turull con cara de preocupación

Ahora se encuentra con el marrón de tener que defender a la vez la legitimidad del referendum del 1-O y la negociación de un nuevo referéndum acordado. O de tener que entenderse con el PSOE en Madrid mientras compite con el PSC en Cataluña. Por eso en Waterloo tienen claro que la importancia ahora está en el relato.

El expresident sigue manteniéndose en la sombra (Puigdemont no aparece desde el 9 de noviembre, cuando firmaron el acuerdo con el PSOE). En su lugar, el partido ha vuelto a dar protagonismo mediático a la presidenta del partido, Laura Borràs. Todo para evitar que su líder siga perdiendo fuelle y llegue intacto a la gran cita electoral, las elecciones catalanas de febrero de 2025.

➡️ Política

Más noticias: