Primer plano del político del PSOE Pedro Sánchez con rostro visiblemente serio

POLÍTICA

Aumenta la tensión interna en el PSOE

La intención de Pedro Sánchez de conceder la amnistía a Puigdemont empieza a pasar factura

Las aguas no bajan precisamente calmadas en el PSOE. La necesidad de contar con los votos de Carles Puigdemont para seguir gobernando está generando tensiones internas. Y, en este sentido, ya empiezan a haber movimientos para que la sangre no llegue al río.

Una de las voces socialistas más críticas respecto al acercamiento a Junts per Catalunya ha sido la de Emiliano García-Page. También ha habido otros rostros históricos del partido que han puesto en duda el futuro pacto con los procesistas, como Felipe González. Pero ha sido el presidente de Castilla La Mancha el que se ha atrevido, desde dentro del PSOE, a confrontar públicamente las intenciones de Ferraz.

Que en el PSOE hay quien anda con la mosca detrás de la oreja es algo evidente, que hoy también remarca El Español. Esta publicación, además, explica que ya han empezado los movimientos internos para calmar la situación. Quién ha cogido el toro por los cuernos ha sido Guillermo Fernández Vara. Y es que el expresidente de Extremadura ha decidido reunirse con Page para “mediar” y “rebajar la tensión interna respecto a la amnistía”.

Pedro Sánchez y Emiliano García Page fundidos en un abrazo durante un funeral

Fernández Vara forma parte del sector afín a Pedro Sánchez y no ha dudado en echarle una mano a su jefe para normalizar las relaciones con los sectores más críticos a los pactos con Puigdemont. Un sector que, según cuenta El Español, cuenta con adeptos incluso entre algunos de los barones próximos al ‘sanchismo’.

Prudencia en el PSOE

Esta reunión forma parte de la estrategia de Ferraz de no echar más leña al fuego en plenas negociaciones con Puigdemont. Otro de los puntos para no tensar más la cuerda es la orden que dio la cúpula del PSOE a sus senadores de no pronunciarse respecto a la amnistía. 

Primer plano medio de Felipe González mirando a cámara y Pedro Sánchez inclinado hacia él para hablar

Y es que los socialistas confían en llegar a un acuerdo con Junts para que los procesistas han presidente a Pedro Sánchez. Pero también son conscientes de que una repetición electoral no es descabellada. Y un paso en falso en las negociaciones pueden acabar siendo un lastre en una hipotética campaña, que se celebraría a principios de enero.