La amnistía encalla

Nuevo encontronazo entre las partes llamadas a la negociación para desencallar la legislatura en España. La líder de Sumar, Yolanda Díaz, ha pedido a Carles Puigdemont que abandone la unilateralidad para alcanzar un acuerdo histórico. Este le ha respondido con un mensaje que enfría el optimismo de la izquierda.

“Me parece que alguien se confunde, no somos nosotros los que necesitamos apoyos para ir a la investidura. Las condiciones no las pone quien te pide ayuda, sino al revés”. Así ha respondido Puigdemont, subrayando la sumisión de PSOE-Sumar a Junts.

Por su lado, el conseller d’Universitats Joan Subirats ha reconocido en una entrevista que “es un poco difícil” que la ley de amnistía esté lista en noviembre. Ha apelado a “que el proceso de negociación avance dentro del marco de la Constitución”. Visto todo en conjunto, parece evidente que la amnistía ha encallado.

Sumar pone condiciones a Junts...

“El acuerdo debe ser amplio y en él no cabe la unilateralidad”. Es la llamada de atención de Yolanda Díaz a Carles Puigdemont a través de una entrevista concedida este domingo en La Vanguardia. La líder de Sumar apuesta por “un acuerdo político y social” por “la reconciliación” y la “convivencia pacífica”.

Para Díaz, “la amnistía no es una ley, sino un amplio acuerdo que culminaría con una ley orgánica”. La líder de Sumar lo ve como un “acuerdo histórico” que debe incluir a los agentes sociales y la sociedad civil. En todo caso, ve un encaje legal en la amnistía siempre que disponga de una “mayoría cualificada”.

...i Puigdemont responde

Desde el inicio de las conversaciones, Junts se ha esforzado por resaltar la sumisión de PSOE-Sumar al independentismo. Con sus palabras, Yolanda Díaz condiciona las negociaciones a la renuncia del independentismo a la unilateralidad. Algo que ha hecho reaccionar inmediatamente a Puigdemont.

“Cuando vas al banco a pedir un crédito puedes negociar si hay un período de carencia y el tipos de interés que te proponen. Pero le puedes poner condiciones y pedir que renuncie a cobrar intereses. Vamos, si es que quieres que te den el crédito, claro”. Con este símil le ha respondido Carles Puigdemont.

La amnistía encalla

Sumar afrontó las negociaciones con mucho optimismo, pero la amnistía cada vez se está complicando más. Ya casi nadie cuenta con aprobar una ley antes de la investidura como pedía Junts. Ni siquiera el independentismo se pone de acuerdo sobre cómo tiene que ser la amnistía y a quién debe incluir.

Más allá del debate sobre su encaje legal, todos coinciden en que una ley de este calado no puede ser aprobada con prisas. Y mucho menos como moneda de cambio o por intereses políticos concretos. La clave está en el consenso social, y ahora mismo no existen ni las mayorías políticas ni la estabilidad parlamentaria para llevarla adelante.