E-Noticies La amenaza al colectivo LGTBI que debería hacer meditar a la izquierda propalestina
El líder de Hezbollah llama a 'matar a todos los homosexuales aunque no estén casados'
La izquierda optó tras el atentado de Hamás el 7 de octubre y la posterior invasión de Gaza por un apoyo acrítico a la facción palestina. Esto ha llevado a contradicciones flagrantes como la existencia del grupo Queers for Palestina, pese a que la homosexualidad está perseguida en Palestina. Ahora corre por las redes sociales un llamativo vídeo que tendría que hacer reflexionar a la izquierda propalestina.
Se trata de un discurso de Hassan Nasrallah, jefe de Hezbollah, una de las organizaciones terroristas islámicas que apoya a Palestina contra Israel. En el vídeo recuerda que la ley islámica castiga con azotes a los hombres y mujeres no casados que cometen adulterio, y con la muerte a los adúlteros casados. “En el caso de los homosexuales”, añade, “no se hacen distinciones entre casados o no casados, todos ellos deben ser ejecutados”.
Esto contrasta con la situación en Israel, uno de los países más tolerantes en el ámbito de los derechos sexuales y pionero en el reconocimiento del matrimonio homosexual. El vídeo está siendo compartido de forma viral en las redes sociales, con mención especial para la izquierda y organizaciones como Queers for Palestine. Hay una avalancha de mensajes recordando que “queers” y “Palestina” son un oxímoron.
La izquierda y su afinidad con Palestina
El vídeo ha llegado también a Cataluña, donde piden explicaciones a ERC, CUP y Comuns sobre su apoyo a Palestina después de estas palabras. Sin ir más lejos, líderes como Ada Colau y Jaume Asens se subieron hace poco a la flotilla de la libertad para llevar ayuda humanitaria a Gaza. Lo hicieron con la retórica habitual que simplifica al conflicto, hablando de “uno de los peores genocidios de los últimos tiempos”.
La filiación de la izquierda a la facción palestina y su odio visceral hacia Israel se añade a su aproximación acrítica hacia el islam. La izquierda suele condenar siempre como islamofobia cualquier crítica al islam, incluso cuando se trata de la vulneración de derechos humanos para trans, gais y lesbianas en los países islámicos. Cuando se trata de escoger entre el colectivo LGTBI y el Islam, la izquierda nunca duda.
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