Adam Majó, el alto cargo de ERC contra Sílvia Orriols que cobra 92.000 euros

De militante de la izquierda independentista en los años duros de Terra Lliure a alto cargo de la Generalitat con un sueldo astronómico. Este es el viaje político de Adam Majó, el director general para la Promoción y Defensa de los Derechos Humanos del Govern de Pere Aragonès. Esta semana ha sido protagonista por la polémica de los empadronamientos a los inmigrantes.

Adam Majó ha acusado a la alcaldesa Sílvia Orriols de un posible caso de discriminación por apurar los plazos de inscripción de los recién llegados. Las redes sociales han estallado al conocer la trayectoria política de Majó, su formación académica y su sueldo. “Activista, el negocio más lucrativo en Cataluña”, se puede leer.

Adam Majó percibe un sueldo de 92.259 euros anuales (más de 7.000 al mes) por su tarea al frente del departamento de derechos humanos. Desde su atalaya lidera la respuesta del Govern para forzar a los ayuntamiento a agilitzar los trámites del padrón. Su obetivo no es otro que la guerra abierta contra Sílvia Orriols y la "extrema derecha".

Ascenso meteórico al calor de ERC

Adam Majó, nacido en Manresa en 1968, es licenciado en Filología Alemana y tiene un Màster en Construcción y Representación de Identidades Culturales. Ha trabajado en el campo de la interpretación en alemán y en inglés, en la docencia, la hostelería y Correos. Pero ha sido su militancia política la que le ha llevado al cargo actual. 

Empezó su militancia política en el Moviment de Defensa de la Terra (MDT), brazo político de la organización terrorista Terra Lliure. En 2007 fue concejal de la CUP, cargo que abandonó en 2015 para pasarse a ERC. Tras ocupar un cargo en el gobierno municipal de Manresa, en 2018 entró a formar parte de la estructura de la Generalitat.

Adam Majó siempre reivindicó su militancia en la izquierda independentista, y defendió las posiciones más radicales durante el Procés. En 2020, ya como director de la Oficina de Derechos Civiles y Políticos de la Generalitat, publicó un libro sobre el fascismo del siglo XXI. Luego fue nombrado director general de Promoción y Defensa de los Derechos Humanos. 

La polémica con Sílvia Orriols

Todo empezó con un artículo de El Periódico acusando a Sílvia Orriols de poner trabas al empadronamiento de los inmigrantes. El Periódico fue el tercer diario que más dinero público recibió el año pasado del Govern de Pere Aragonès. Su denuncia motivó que el departamento de Adam Majó y la Síndica de Greuges salieran en tromba contra Orriols.

La ley obliga a los ayuntamientos a empadronar a todos los inmigrantes, y da un plazo de tres meses. El ayuntamiento de Ripoll está apurando los plazos. Algo que no solo se ajusta a la legalidad, sino que también hacen desde años unos cincuenta ayuntamientos gobernados por PSC, ERC, Junts y Comuns, entre otros.

La obsesión contra Aliança Catalana y Sílvia Orriols ha llevado a la prensa subvencionada y a los cargos bien pagados del Govern a cargar contra la alcaldesa de Ripoll por cumplir la ley. Incluso el Gobierno de España ha acabado pidiendo explicaciones a la alcaldesa. ¿Pedirá alguien explicaciones a Ensenyament y Salut por haber ofrecido servicios públicos a inmigrantes sin empadronar, como recoge el artículo de El Periódico?