Acusan a Toni Comín de cometer ilegalidades económicas en el Consell de la República

Toni Comín, mano derecha de Carles Puigdemont en el “exilio”, vuelve a estar en el ojo del huracán por supuestas irregularidades en el Consell de la República. Recordemos que Comín dirige junto a Puigdemont esta suerte de gobierno paralelo sin reconocimiento legal ni internacional. La entidad hace tiempo que atraviesa una crisis, ya que las bases acusan a la dirección de haberse cepillado la democracia interna para tomar las decisiones a su antojo. 

Los críticos con la deriva del Consell señalaron directamente a Toni Comín como cabecilla del golpe para suprimir el órgano legislativo (Asamblea de Representantes) y dar todo el poder a la ejecutiva (Govern del Consell). Además, lanzaron la sospecha de que Comín utilizaba el Consell de la República para sus intereses personales. Entre otros, lucrarse y favorecer a familiares y amigos con la contratación de los servicios.

Según publica El Món, los capataces de Catglobal ASB, la empresa que presta cobertura legal y económica al Consell, acusan a Toni Comín de irregularidades y piden su inmediata dimisión. Hablan de “agravios” relacionados con el pago de facturas y salarios, cambios de las entidades que gestionan los fondos y un auténtico fiasco contable. Además, revelan que la gestión financiera a menudo no se ajusta a la legalidad belga. 

Dos versiones opuestas

La versión de la empresa es que Comín habría supervisado una gestión plagada de errores, en el ámbito de la contabilidad, la fiscalidad y la legalidad. Toni Comín hacía de interlocutor entre esta empresa y el gobierno paralelo en exilio. Ahora piden que se investigue a fondo y lo antes posible este caso en el que podría estar implicado el recién elegido diputado de Junts en el parlamento europeo.

Pero también hay voces internas que afirman que todo esto no es más que un embrollo administrativo que se ha ido de las manos, e incluso una vendetta de sectores descontentos por la forma de gestionar el Consell.

Fuentes oficiales del Consell citadas por El Món aseguran que las cuentas están limpias y que se someten periódicamente a controles por parte de la Hacienda belga. Creen que detrás de las acusaciones hay “gente que se ha enfadado” con la forma de gestionar de Comín. Los responsables de la ejecutiva del Consell se han puesto a disposición de los denunciantes para revisar la documentación que haga falta y aclarar la situación.

Comín, nuevamente señalado

Con el estallido de la crisis en el Consell de la República, el año pasado, ya acusaron a Toni Comín de “gastos innecesarios” para “lucrarse” a costa de la entidad. También para beneficiar a personas cercanas. 

Especialmente llamativas fueron las declaraciones de Júlia Taurinyà, exdelegada del Consell en la Catalunya Nord, según la cual “un día se sabrá todo”. Preguntó “cuánto costó el mítin de Perpiñan, con qué dinero se pagó, y por qué no se contrató a una empresa de la zona”. A lo que otros respondieron que la empresa contratado es propiedad de la Betona Comín, hermana de Toni Comín, que además “en la época de CiU recibía adjudicaciones a dedo bastante sospechosas”.