Dos hombres, uno con gafas y nariz de payaso y otro hablando en un micrófono, sobre un fondo rosa con líneas negras.
OPINIÓN

Llach y Pesarrodona: la nueva ANC es imparable

No se sabe qué tipo de presión puede ejercer esta ANC, como no sea amenazar con la vuelta a los escenarios de Llach

Imagen del Blog de Octavio Cortés

En estos días de verano, la ANC (la rama geriátrica del Club Super 3) está muy activa en las redes sociales publicitando la tourneé de los señores Llach i Pesarrodona por el “territori”. Antes que nada, observar que en la peculiar jerga de los procesistas, cuando se dice que uno está recorriendo el “territori” lo que hace es ir de costellada en costellada hasta que el corazón aguante.

Recordemos la indescriptible caminata de Turull después de su excarcelación: cuando llegaba a cada pueblo los concejales se sentían obligados a ir a vitorearle como si hubiera ganado el Tour de Francia, las señoras se abanicaban, los guitarristas sudaban, los niños lloraban. O la reciente gira de Oriol para conseguir apoyos, consistente en acudir a pequeñas cafeterías de pueblo y castigar allí sin piedad a los tres o cuatro asistentes (gente asustada, en su mayoría, que piensa que su nuera puede perder su plaza en la Diputación) con discursos sobre la bondad humana, el amanecer de la era de Acuario y las excelencias culturales de los violadores magrebís.

Captura de pantalla de Twitter

Ahora van por esos caminos del buen Dios el señor Llach y su Sancho Panza, consiguiendo que en sus actos se cumpla una divertidísima proporción matemática: la edad media de los asistentes es siempre mayor que el número de asistentes. La verdad que tiene mérito.

No se sabe, a día de hoy, qué tipo de presión puede ejercer esta ANC, como no sea amenazar con la vuelta a los escenarios del señor Llach. Ahora mismo, ni siquiera pueden abrazarse ya al Totem de Waterloo, de manera que parecen estar bailando un tango consigo mismos a la luz de una farola.

Eso sí, las huestes de Vilaserp lo bendicen todo desde la distancia: Josep Costa con su rictus de Playmobil endemoniado y Albano Dante con sus gintonics de media mañana (no por vicio, sino por acompañar el bocadillo de calamares). A esto, al parecer, se reduce todo después de años de entusiasmo y agitación. Junts vota junto al PP y Vox en el Congreso, ERC implosiona por el Alzheimer y la CUP está ocupada en su proceso de reflexión número 562229332, tratando ponencias sobre los macacos de las junglas de Ceilán. 

Salvador Illa, mientras tanto, espera su turno, estudiando el Corán y haciéndose la manicura. Todo irá bien.

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