Diario de campaña, día 4: Cataluña, capital Ginebra

Ginebra, ciudad de paz, verificadores y refugio de fugados de la justicia española, ha sido este domingo el escenario del acto central de ERC. Hasta la ciudad suiza se ha desplazado toda la dirección del partido republicano para facilitar que dos de sus exiliados, Marta Rovira y Rubén Wagensberg, pudieran estar presentes.

Vueling y Easyjet hicieron en agosto... acto de pequeño formato, con Pere Aragonès y Oriol Junqueras, sin despertar ningún interés entre los locales. En Ginebra Aragonès avisó de un posible pacto entre el PSC y Junts para gobernar dejándole fuera a él del poder... Junqueras, por su parte, presentó a ERC como el único partido capaz de articular una mayoría para el referendo.

Este domingo todos los líderes nacionales estuvieron presentes en Cataluña. Con la salvedad de Pedro Sánchez, que si este lunes decide seguir en el poder, pronto podrá satisfacer la demanda de Salvador Illa de acompañarle en campaña.

Alberto Núñez Feijóo estuvo en Lleida, o Lérida según dijo este domingo Isla en un rebautizo de la capital de poniente muy criticado en las redes, junto a Alejandro Fernández. El presidente del PP se anticipó a los hechos, y aunque en privado en su partido dicen que lo de Sánchez es una pantomima, ayer aseguró que el líder socialista "ya ha pasado".

Santiago Abascal viajó hasta Tarragona para acompañar a Ignacio Garriga en el primer acto del líder de Vox en esta campaña. Abascal también se refirió al jefe del Ejecutivo español para acusarle de victimizarse. Y pidió elecciones anticipadas cuanto antes.

Yolanda Díaz, a quien los de Sumar no quieren mucho por Catalunya estos días, estuvo en L'Hospitalet de Llobregat para acusar a Feijóo de “laminar la política española”. A modo de pitonisa la vicepresidenta del Gobierno español vaticinó que a la derecha "le queda mucho tiempo en la oposición".

Puigdemont, desde Francia, garantizó que no pactaría en ningún momento ni con el PSC -pese a la opinión de Aragonès-, ni con el PP, ni con Vox ni con Aliança Catalana. El candidato de Junts+ Puigdemont por Catalunya se ve capacitado para ser investido en segunda vuelta.

La candidata de la CUP, Laia Estrada, también en Tarragona -ciudad que acogió este domingo la mayoría de actos electorales-, apeló al voto de los desencantados de Esquerra Republicana. Como no, en el Camp de Tarragona, la candidata cupero también aprovechó para rechazar el proyecto del Hard Rock que le impidió a la CUP apoyar a los Presupuestos que han desembocado en el adelanto electoral.

PD: Los diputados y candidatos de Junts parecen niños pequeños, emocionados, publicando vídeos en sus redes sociales cuando avanzan por la autopista en los autocares con la cara de Puigdemont. El último, este domingo, fue Joan Canadell. Incluso se les escucha hablar de forma emocionada... es amor platónico por su líder.