Argentina, la Hispanoamérica del presente y del futuro

Dicen que viajar a China cada 5 años es encontrarse con un país diferente, pero que si lo haces cada 20 te encuentras que en realidad nada ha cambiado.  

Un viaje a Argentina —yo visito este país desde el año 2001— nos muestra esto mismo, pero al revés. Cinco años no son nada para un país nacido bajo el signo de cáncer y anclado en la melancolía y el pasado. Pero veinte sí que lo son. Generaciones diferentes. 

Igual que el abuelo que construye la empresa, el hijo la mantiene y el nieto la vende, por fin parece que el mito Peronista ha llegado a su límite de 3 generaciones. Los menores de 30 años lo aborrecen y les suena a algo tan lejano como realmente es. Un señor contemporáneo de Franco que se seguía teniendo como referente en el 2022. Un anacronismo.

Quienes seguimos la “Matemática de la historia” de A. Deulofeu y su nieto Juli G. Deulofeu, jugamos con las cartas marcadas. Sabíamos desde hace años que ahora, precisamente ahora, están pasando cosas muy interesantes en Argentina. Tenemos la posibilidad de ver con nuestros ojos una nueva civilización en su momento de nacimiento: Toda la región del Río de la Plata o el también llamado Cono Sur. 

Para que el lector se sitúe en el tiempo y el espacio, el año 0 de una civilización nos llega siempre a través de leyendas y mitos, el nacimiento de Egipto, de Roma, de Grecia, de China, etcétera. 

Este preciso momento es donde está el cono Sur.

Tienen por delante la libertad de reinventarse, de pensar en lo que quieren ser de mayores, como un niño acabado de nacer y todo una vida para vivir. 

En la Argentina, como explica muy bien J. G. Deulofeu en su tesis, convienen dos momentos históricos. La Argentina interior vive en el ciclo del que fue el imperio Inca. Ahora mismo está en una fase casi medieval, con señores locales que a modo de aristócratas reinan en las provincias. En el Río de la Plata, han acabado el período de Aristocracia de la riqueza y entran a una nueva etapa, un año 0, un largo período de libertad.  

Creo que aun con muchos problemas, Argentina será uno de los faros del mundo en los próximos años y la referencia del mundo hispano.

Y ahí, sabiendo todo esto, quiero decir varias cosas a los Argentinos:

Cuiden las provincias, ayúdenlos a librarse de los señores feudales. Países extranjeros pueden empujar a las provincias contra Buenos Aires, me atrevo a decir hasta de manera militar. Ya dijo en su día Churchill que al mundo Anglosajón no le interesa una Argentina Rica y poderosa, ni en verdad ningún país hispano. 

Si quieren privatizar, recuerden que las empresas se han pagado con el dinero de todos, repartan acciones entre todos los argentinos y que sean libres de venderlas o quedárselas. 

La mayor anomalía del mundo es el mundo hispánico. Países hermanos con la misma lengua y costumbres y separados por fronteras y absurdas monedas. Argentina, busca un sistema nuevo de asociación con el comercio y la cultura, empieza a juntarlos. Incentiva que los hispanos podamos trabajar y vivir en todos los países del que antes fue el territorio más rico del mundo.

Milei ha aparecido en el momento justo y es lo que el país necesita. Ilusión, descaro, provocación y unas ganas terribles de cambio. No importan en realidad como lo haga, nos atrevemos a augurar que el peronismo no volverá y que su tiempo ha pasado.

Todo pasa en este mundo, Argentina ha dado vuelta a la página. Inicia un nuevo capítulo.