¿Sabías por qué había gente sin nariz en Inglaterra? Esta tiktoker te lo explica
Durante los siglos XVII y XVIII, los ingleses más ricos perdieron su nariz por una causa que pocos conocen
La tiktoker @Jackycrimenyrimmel cuenta una historia que le pone los pelos de punta a cualquiera y que mucha gente desconoce.
Durante la época victoriana, los ingleses más pudientes estaban obsesionados con el azúcar y lo consumían en grandes cantidades. Como la higiene dental en esa época era inexistente, sufrían de caries y otras enfermedades que les provocaban la pérdida de dientes.
En la alta sociedad era impensable relacionarse con los demás sin una buena dentadura, por lo que buscaron la manera de solucionar este problema con el implante de dientes.
Dientes postizos y una pandemia de sífilis
La solución de los dentistas de esa época era la de extraer los dientes de la población más pobre, ya que esta no tenía acceso al consumo de azúcar por su alto coste y colocárselos a los ricos.
El problema era que esas personas tenían una buena dentadura, pero estaban enfermos de sífilis, por lo que le contagiaban la enfermedad a quienes recibían sus piezas dentales.
Una de las consecuencias de la sífilis, una enfermedad que ataca los tejidos blandos, era perder la nariz. En esos años la élite inglesa sufrió una pandemia de esta enfermedad tan contagiosa, lo cual significaba un gran estigma social y ser un auténtico apestado. Algunas personas afectadas se ponían una especie de nariz postiza para disimular, pero no era muy efectiva.
Una solución poco ortodoxa
Una de las soluciones que encontraron los médicos de esa época y que ya se practicaba desde hacía siglos en la India era hacer una rinoplastia. Sin embargo, en esos años las técnicas quirúrgicas no estaban muy evolucionadas, así que la operación consistía en cortar un trozo de brazo y coserlo a la cara.
Este procedimiento era una manera de garantizar que había riego sanguíneo en el tejido, con lo cual los ingleses ricos de la época victoriana se pasaban en esa postura por al menos un mes.
Sin duda, quienes sufrieron la pérdida de su nariz se arrepentirían toda la vida de ser tan golosos, así que no te olvides de lavarte los dientes.
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