El problema de Amador Mohedano con Fidel Albiac que todavía no se ha solucionado

Amador Mohedano vuelve a estar de máxima actualidad en medio de sus complicados problemas con Hacienda. Es más, hace poco aprovechaba para volver a arremeter contra su sobrina, Rocío Carrasco.

De ese modo, daba a entender que la había llamado varias veces, pero ella nunca le ha respondido en la misma medida.

"La hemos seguido llamando muchas veces, tanto yo como mi hermana Gloria o mi cuñado José Antonio", confesaba en una de sus últimas intervenciones públicas.

"Pero ella nunca te contesta, ni a las llamadas, ni a los correos electrónicos ni nada, pues para qué voy a perder el tiempo", sentenciaba implacable.

Del mismo modo, Amador Mohedano asegura que sigue muy dolido con su sobrina, sobre todo "por las barbaridades que ha dicho".

Sin embargo, Rociíto no es la única con la que tendría un grave problema que no consigue solucionar, ya que también ha apuntado a su marido, Fidel Albiac.

Hace tiempo que Amador Mohedano arremetía directamente contra Albiac, al que culpa del distanciamiento que Rocío ha tenido con toda su familia, pero más que nada con sus propios hijos.

"Si Rocío Jurado estuviera viva no permitiría que su hija estuviera lejos de la familia. Ella nunca se hubiera imaginado que esto hubiera llegado a lo que llegó", sostenía bastante afectado.

Amador Mohedano, implacable con Fidel Albiac

Y era ahí cuando acusaba a Fidel Albiac de ser el principal responsable. "Alguien con mucha ambición la ha abducido, yo no tengo ninguna duda", alegaba respecto al abogado.

"Mi sobrina ha sido siempre una niña simpatiquísima. Era encantadora hasta que dejó de serlo", acusaba a Carrasco. Así, dejaba entrever cuáles eran las verdaderas intenciones de Fidel, que parecía estar muy interesado en la herencia de 'la más grande'.

"Fidel tenía mucho interés en saber qué iba a pasar con la herencia cuando Rocío Jurado muriera", arremetía contra él. Aunque las acusaciones más graves estaban relacionadas con situaciones que Rocío y David Flores habían vivido en casa de su madre.

Acusaciones en las que Fidel Albiac sale bastante perjudicado, sobre todo en referencia a los duros castigos que supuestamente les imponía.

"Los niños se sentían cohibidos. Los castigos... Los niños se sentían mal, los encerraba en la habitación a menudo. Los niños no estaban a gusto ni felices en esa casa, y punto", zanjaba demoledor Mohedano.

Sin duda, un conflicto que a día de hoy todavía no han conseguido solucionar.