Jaime de Marichalar toma una decisión al descubrir en qué hospital está la reina Sofía

Jaime de Marichalar no ha sido ajeno a la noticia sobre el inesperado ingreso hospitalario de doña Sofía. La emérita tuvo que ser hospitalizada el pasado martes 9 de abril, pero no se supo hasta el día de ayer. Tal y como informaron desde la Zarzuela, su ingreso se debió a una infección en el tracto urinario.

Jaime supo de inmediato en qué centro estaba ingresada la que fue su suegra y tomó una determinación. En un primer momento, su deseo era ir a visitarla, pero cambió de opinión al saber que la infanta Elena acudiría a la clínica. Así las cosas, Marichalar decidió estar presente en el funeral de la princesa Ira de Fürstenberg, donde coincidió con varios de sus amigos.

Jaime de Marichalar no visita a Sofía y decide acudir al funeral de una amiga

Jaime de Marichalar tenía ayer, miércoles 10 de abril, un compromiso en la Real Basílica de San Francisco el Grande de Madrid. En ese emplazamiento iba a tener lugar el funeral por el eterno descanso de la princesa Ira de Fürstenberg, fallecida el 19 de febrero.

Justo muy cerca de allí se encuentra el Hospital Ruber, donde horas antes había ingresado doña Sofía por una infección urinaria. Dada la poca distancia entre ambos lugares, se rumoreó que Marichalar iría a visitar a la que un día fue su suegra. Sin embargo, este decidió no ir y acudir directamente al funeral de la hija del príncipe Tassilo de Fürstenberg y Clara Agnelli.

Allí se dio cita con numerosos conocidos y amigos, entre los cuales se encontraban Isabel Preysler, Alfonso Díez y Eugenia Martínez de Irujo, entre otros. Marichalar decidió pasar la tarde junto a sus amistades y no acudir al hospital para conocer de primera mano el estado de doña Sofía.

Sin embargo, pese a esta decisión, el exduque de Lugo sí se preocupó por el estado de la emérita. Preguntó dónde se encontraba ingresada, lo que hacía pensar en su posible visita. No fue así, y uno de los motivos guarda relación con la llegada de la infanta Elena al centro hospitalario.

Jaime de Marichalar cambia de opinión al enterarse de la llegada de la infanta Elena

Durante el día de ayer muchos fueron los rostros que acudieron a la clínica Ruber para visitar a doña Sofía. Marichalar iba a ser uno de ellos, pero tuvo conocimiento de que la infanta Elena también iría y optó por no visitarla.

Jaime no deseaba encontrarse con su exmujer, quien acudió al hospital por la tarde, justo cuando su exmarido se dirigía al funeral. La infanta llegó con ropa cómoda y rostro serio, pero tranquila por la positiva evolución de su madre.

Por su parte, Marichalar se reencontró con sus amigos, con los que compartió buenos momentos junto a la princesa Ira de Fürstenberg. Durante los años en los que vivió en Marbella, se rodeó de lo más granado de la aristocracia española.

Doña Sofía continúa ingresada, pero evoluciona rápida y favorablemente, por lo que no se prevé que pase muchos días hospitalizada. El exduque de Lugo todavía tiene tiempo de ir a verla, aunque siempre se rumoreó que la relación entre ellos no era del todo buena.

Así lo publicó la periodista Carmen Enríquez en su libro Sofía: nuestra reina, donde afirmó que la emérita nunca creyó en esa relación. Pensaba que le movían otros intereses y no vio con buenos ojos la vida que Jaime de Marichalar llevaba durante su matrimonio con Elena.

Pese a estos rumores, Sofía sí tuvo un gesto con el que fue su yerno cuando en 2014 falleció su madre, la condesa de Riupalda. Acudió a su entierro para darle sus condolencias a Marichalar y le acompañó en ese duro momento. Veremos si el exduque de Lugo corresponde a ese gesto y decide acudir al hospital para interesarse por su estado de salud.