La infanta Cristina, sin escapatoria tras el último movimiento de Iñaki Urdangarin

La infanta Cristina ha regresado a Madrid para asistir al cumpleaños de la princesa Leonor. Tan prudente como siempre, no ha dado declaraciones sobre el proceso judicial que está atravesando para divorciarse de Iñaki Urdangarin. Sin embargo, el antiguo duque de Palma ha dado un movimiento inesperado y Cristina de Borbón no tendrá más remedio que pasar a la acción.

Iñaki, según la información de la experta en Casa Real Pilar Eyre, no quiere que nadie sepa que está trabajando. También aparenta llevar una vida austera, algo que pretende demostrar con estilismos más modestos.

Iñaki Urdangarin ocupó la portada de una conocida revista gracias a una buena noticia: había encontrado trabajo. De forma instantánea su abogado salió a desmentirlo e incluso el dueño de la empresa le quitó importancia a la información. La periodista Pilar Eyre sabe que detrás de todo esto hay un movimiento que ha dejado sin escapatoria a la infanta.

Cristina de Borbón estaba dispuesta a pagarle una manutención a Iñaki, pero puso sus propias normas. En primer lugar dejó claro que sus hijos todavía no podían relacionarse con Ainhoa Armentia. Después se aseguró de que Urdangarin no publicase el libro que había escrito en la cárcel y que no dejaba en buen lugar a su padre, don Juan Carlos I.

Cuando todo estaba en orden, la infanta Cristina dio un paso atrás y se negó a firmar el acuerdo definitivo. Lejos de hundirse, Iñaki Urdangarin aprovechó esta circunstancia para asegurarse su futuro económico.

El movimiento de Iñaki Urdangarin perjudica a la infanta

"Cuando se dijo que Iñaki estaba empleado en la misma constructora de Ainhoa, su abogado se apresuró a desmentirlo con una celeridad y precisión inauditas. Incluso, el propietario de la empresa tuvo el gesto insólito de negar esa relación laboral", escribe Pilar. Detrás de todo esto hay una explicación.

A Urdangarin no le interesa que el juez considere que ya es económicamente independiente. De esta forma puede solicitar una manutención más alta. La última cifra que han acordado es inferior a sus ambiciones y está esforzándose por aumentarla.

"Cree que tiene derecho a una cantidad importante para compensar su tiempo en prisión por unos delitos de los que él en parte no se considera culpable. Pues declaró en el juicio que todo lo había consultado con la Casa Real, que había dado el visto bueno", explica la experta.

Esta estrategia ha dejado sin margen de movimiento a la infanta Cristina. No obstante, estaba dispuesta a llegar a un acuerdo económico, de hecho eso no es lo que le molesta. Lo que realmente le importa es que sabe que Iñaki podría casarse con Ainhoa Armentia después de regularizar el divorcio.