Se filtra el problema que tiene Carlos III con su hijo Guillermo: 'Le saca de quicio'
La tensión entre Carlos III y el príncipe Guillermo sale a la luz en un momento crítico para la monarquía británica
La monarquía británica vuelve a ser centro de controversia tras revelarse un problema entre el reyCarlos III y su hijo, el príncipe Guillermo. Una experta en realeza británica ha desvelado que la relación entre ellos es prácticamente inexistente. Además, afirma que Carlos III siente que Guillermo le eclipsa tanto a él como a su reinado, intensificando una rivalidad que podría tener consecuencias en el futuro de la Corona.
Estas revelaciones llegan en un momento delicado para Carlos III, quien había soñado con este papel, pero se enfrenta a constantes críticas por su desempeño. Su reinado está siendo percibido como de transición y ya hay rumores sobre una posible abdicación. La tensión interna en la familia real pone de manifiesto cómo las diferencias entre padre e hijo afectan no solo su relación personal, sino también la percepción pública de la institución.
Ana Polo Alonso, experta en la casa real británica, ha aclarado todos estos temas en una entrevista para Socialité. Ha aclarado que, aunque la abdicación está descartada y sigue siendo un tema tabú en Inglaterra, la sombra del futuro reinado de Guillermo parece proyectarse sobre Carlos III.
Sale a la luz el problema que tiene Carlos III con su hijo Guillermo
El rey, que accedió al trono a una edad avanzada, esperaba consolidar su legado, pero parece estar luchando contra el peso de las expectativas. "Carlos siempre había soñado con llegar a ser rey y está muy cabreado porque no está haciendo todo lo que le hubiese gustado hacer", ha afirmado Polo en Socialité.
Aunque en otras monarquías europeas la abdicación es un concepto aceptado, en el Reino Unido sigue siendo un tema tabú. "La abdicación está descartada. Es un tema que no se contempla en Inglaterra", asegura Ana Polo.
El reinado de Carlos III, descrito como uno de transición, se enfrenta a críticas constantes que podrían haber influido en su relación con Guillermo. Para el actual monarca, quien esperó décadas para asumir el trono, las limitaciones de tiempo y el escrutinio público parecen pesar más que nunca.
En este contexto, el contraste con su hijo Guillermo, quien mantiene una imagen pública impoluta, es un punto de fricción constante. La relación entre Carlos III y Guillermo es fría y distante. "La relación entre ellos es prácticamente inexistente", asegura la experta en Socialité.
Esta rivalidad no solo se refleja en lo personal, sino también en el ámbito público. "Le está sacando de quicio y se siente eclipsado por Kate Middleton y por Guillermo. Carlos es una persona obsesionada por su popularidad y por lo que dicen los medios de él", agrega.
La situación de Guillermo ante la posibilidad de tomar el relevo de Carlos III
Aunque el príncipe Guillermo es visto como el futuro de la monarquía, Ana Polo también arroja luz sobre algunos aspectos menos conocidos de su personalidad. "A pesar de que refleja esta imagen absolutamente impoluta, es bastante más complejo. Está la idea de ser rey, le gusta la autoridad, le gusta mandar", explica la experta.
Un tema polémico es la negativa de Guillermo a hacer públicos los detalles sobre los impuestos que paga, una práctica que tanto Isabel II como Carlos III han mantenido abiertamente. "Cada año podría estar ganando unos veinte millones de libras", añade Polo, destacando un lado más pragmático y calculador del heredero al trono.
Sin embargo, no todo es ambición para Guillermo. Según la experta, el príncipe también enfrenta sus propias inseguridades. "A Guillermo le da auténtico pánico el hecho de ser rey. Lo de tener que estar siempre expuesto a los medios le cuesta horrores", confiesa la experta.
Las diferencias entre Carlos III y Guillermo plantean preguntas importantes sobre el futuro de la monarquía. Si bien Carlos busca consolidar su legado, la popularidad de Guillermo y Kate Middleton sigue creciendo, generando comparaciones inevitables.
La filtración sobre la tensión entre Carlos III y Guillermo revela una dinámica complicada dentro de la familia real británica. Mientras el actual monarca lucha por afirmar su lugar, su hijo parece estar preparado para asumir el trono, aunque no sin sus propias contradicciones. Esta rivalidad podría marcar el rumbo de la monarquía en los próximos años, planteando preguntas sobre la sostenibilidad y relevancia de la institución.
Más noticias: