El detalle en el nuevo retrato de Felipe y Letizia que dejará a todos en shock

El nuevo retrato de los reyes de España, realizado por la célebre fotógrafa Annie Leibovitz, está dando mucho de qué hablar. Presentado por el Banco de España este martes 26 de noviembre, el retrato conmemora el décimo aniversario en el trono de Felipe y Letizia. Pero hay un detalle en esta imagen que ha causado un gran revuelo entre los expertos y seguidores de la Casa Real.

En la imponente composición, el rey Felipe y la reina Letizia posan por separado, pero la escena es una sola. La disposición de ambos en un díptico refleja majestuosidad y estilo, pero también revela una diferencia muy significativa entre ambos. Letizia ha elegido un look sin tiara, mientras que Felipe luce todas sus condecoraciones en uniforme.

Este gesto estilístico no es casual, ya que cada elemento ha sido minuciosamente pensado. La reina ha optado por un diseño de alta costura sin accesorios excesivos, pero destaca una capa roja que evoca a los reyes eméritos. Este detalle ha despertado teorías sobre el mensaje detrás de esta elección y el simbolismo que podría representar.

Letizia decide posar sin tiara y hace un guiño a Juan Carlos y Sofía  

Annie Leibovitz capturó a Felipe y Letizia en el Salón Gasparini del Palacio Real, logrando una estampa de inspiración hollywoodiense. Doña Letizia ha sorprendido con un impresionante vestido negro de Cristóbal Balenciaga, una pieza única y sofisticada que, lejos de desentonar, le da protagonismo. La reina ha mantenido la elegancia sin excesos, destacando un diseño drapeado que realza su figura y añade un toque de glamour con una voluminosa falda de tul.

Uno de los detalles más comentados es la ausencia de una tiara en el look de la reina. Mientras que en otros retratos ha optado por lucir joyas imponentes, en esta ocasión prefirió una gargantilla de diamantes y sus característicos pendientes de chatones. Esta elección estilística podría interpretarse como una declaración de independencia y modernidad en su papel de consorte.

Además, la capa roja que acompaña el vestido no es un simple complemento. Este vibrante accesorio recuerda a los reyes eméritos, Juan Carlos y Sofía, y podría interpretarse como un guiño de respeto hacia ellos. La elección de la reina marca, posiblemente, un paso simbólico en su rol, en el que busca mantener un equilibrio entre tradición y contemporaneidad.

Felipe VI se decide por un majestuoso uniforme

A diferencia de Letizia, el rey decidió utilizar un uniforme de gala y cambió su vestimenta en tres ocasiones durante la sesión. Al final, la fotógrafa y el monarca se decantaron por el uniforme de Capitán General del Ejército de Tierra.

Felipe VI ha elegido este traje para reafirmar su compromiso con sus deberes como jefe de las Fuerzas Armadas. Le podemos ver con un fajín rojo y la banda azul de la Orden de Carlos III, confiriéndole un aire de máxima distinción.

El uso de este uniforme no solo resalta su rango, sino que representa una continuidad con la figura de su padre, el rey emérito, quien posó en uniforme en numerosas ocasiones. Este detalle ofrece una imagen de estabilidad y tradición que algunos interpretan como un reflejo del respeto de Felipe hacia su linaje.

Este retrato de Felipe y Letizia ha causado un gran impacto por su simbolismo y detalle. La elección de vestuario y estilo sugiere un mensaje de modernidad y respeto a la tradición. Este nuevo posado, sin duda, quedará como una imagen histórica en el décimo aniversario del reinado.