e-Notícies, Instagram, @xgraset El curioso dato de la vida personal de Xavier Grasset que probablemente no sabías
El periodista ha logrado formar una familia que vive lejos de los focos de los platós en los que él trabaja
Xavier Grasset es uno de los presentadores catalanes más conocidos. Su naturalidad delante de las cámaras ha hecho que explicar y narrar noticias sea más fácil de lo que parece. También su experiencia, ya que acumula años de periodismo serio y contrastado a sus espaldas.
Pero sus dotes como profesional del periodismo todo el mundo los conoce. Ahora bien, hay un dato de su vida más privada que puede que muchos no sepan ni que existe. Y es que Xavier Grasset es padre de familia, pero no de una cualquiera.
L'Anna y el Bernat son sus dos hijos gemelos. Unos hermanos que han llenado de vida, sonrisas y alegría la casa de un matrimonio que guarda una de las historias de amor más bonitas. Los hijos de Xavier Grasset nacieron cuando el presentador ya superaba la cuarentena, aun así, su llegada siempre ha sido una bendición.
La parte más familiar de Xavier Grasset
El periodista natural de Vilaseca, Tarragona, se enamoró en un plató de televisión. Y fue fruto de la casualidad que se enamorara de una abogada de Reus con amigos en común. Se trata de Anna Maria Vilella, una letrada que antes de ser esposa fue fan del presentador.
Xavier Grasset es padre de gemelos | 3Cat
Un primer encuentro en Catalunya Ràdio, una comida con amigos y un flechazo hicieron todo lo necesario para que el amor triunfara. Ahora, muchos años después, lo que empezó como una relación de dos se ha convertido en una familia de cuatro. Dejando al lado la obviedad de que el padre es el famoso, los hijos gemelos de Xavier Grasset también han aparecido en público alguna vez.
Un padre orgulloso de sus gemelos
Una de ellas tuvo lugar durante una entrevista en la tarda de Catalunya Ràdio. En las imágenes se puede ver cómo el periodista bromea sobre la posibilidad de volverse a ir como corresponsal a otro país como Rusia. Sus hijos lo miran atentamente y sonríen ante la evidente broma de su padre.
Más allá de eso, él mismo ha compartido en sus redes sociales algunas imágenes de Anna y Bernat. Justo el día que cumplieron 11 años, su padre se encargó de gritar al mundo que ambos son sus "motores de vida". Ahora, 15 años después de su nacimiento, seguro que siguen llenando de ilusión un hogar en el que las letras y el amor nunca faltarán.
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