Antonio Tejado reaparece tras romper con María del Monte y todos se fijan en lo mismo

Antonio Tejado ha vuelto a acaparar miradas tras su última aparición en los Juzgados, donde acude quincenalmente a firmar. Su distanciamiento con su tía, María del Monte, y las acusaciones en su contra lo mantienen en libertad provisional. Sin embargo, en esta ocasión, un detalle en su aspecto físico ha captado la atención de todos: el evidente aumento de peso del sevillano.

Desde su arresto el pasado febrero, Tejado ha buscado mantenerse en un discreto segundo plano. La situación legal y la ruptura con su tía han marcado profundamente al excolaborador, quien intenta alejarse del foco mediático. A pesar de sus intentos de mantener una vida más tranquila, cada aparición pública genera especulación y curiosidad entre el público.

Antonio, que enfrenta uno de los momentos más complejos de su vida, sigue a la espera de una resolución judicial. Mientras tanto, se ha visto obligado a suspender sus proyectos laborales y personales, afectando su estabilidad emocional y física. ¿Cómo está sobrellevando esta etapa tan complicada? Su notable cambio físico parece hablar por sí mismo.

El cambio físico de Antonio Tejado capta todas las miradas en los Juzgados de Sevilla

Antonio Tejado fue detenido en febrero tras ser acusado de participar en el robo a la casa de su tía, la cantante María del Monte. Desde entonces, su vida dio un giro drástico, y en mayo obtuvo la libertad provisional a la espera de juicio. Aunque la acusación sigue pesando sobre él, Tejado ha buscado retomar la normalidad, evitando las cámaras y los comentarios públicos.

Sin embargo, cada quince días acude al Juzgado para cumplir con su firma quincenal, lo que lo expone nuevamente al escrutinio público. La llegada de Antonio a los Juzgados es siempre un evento de interés mediático, y en cada visita, guarda el mismo hermetismo. Ante los rumores de su estado emocional, Tejado prefiere no dar declaraciones, dejando a la prensa sin respuestas.

Esta última vez, en su llegada al lugar, se le vio con un notorio aumento de peso que no pasó desapercibido. La situación, además de mantenerlo en una tensión constante, parece haber tenido un efecto en su apariencia física.

La tensión y el estrés acumulado  desde su detención han repercutido en la salud de Antonio Tejado, reflejándose en su físico. Según hemos podido comprobar, el excolaborador ha ganado varios kilos, un cambio que no ha pasado desapercibido para el público.

Su imagen dista mucho de la que proyectaba en su época de colaborador en televisión. Sin embargo, los medios captaron cómo Tejado, antes de entrar al Juzgado, se arreglaba frente al espejo retrovisor de su moto. Un gesto que, a pesar de los cambios, muestra su deseo de mantener una buena imagen y confianza ante las cámaras.

El cambio en su físico podría ser una consecuencia del estrés constante y la falta de actividad laboral y social que ha experimentado. Con los ánimos bajos y la presión de su situación, Tejado ha encontrado difícil mantener sus rutinas y hábitos. 

La ruptura con María del Monte y la presión mediática

La relación entre Antonio Tejado y su tía María del Monte ha sufrido un fuerte distanciamiento desde el incidente. La artista, conocida por su carácter reservado, ha evitado comentar públicamente el tema y se ha mantenido al margen de la situación de su sobrino. Antonio, por su parte, se ha abstenido de hablar al respecto, reforzando el silencio que lo acompaña desde su detención.

Para Antonio, esta etapa no solo representa un reto judicial, sino también un desafío emocional. Aunque siempre ha tenido una relación cercana con su familia, la tensión por las acusaciones ha fracturado la relación con María del Monte. Este conflicto ha sumado presión en su vida personal, y según algunos cercanos, su estado anímico se ha visto afectado.

Desde su salida en libertad provisional, se comenta que Antonio ha estado recibiendo apoyo psicológico. Acudir a terapia es parte de su estrategia para manejar la ansiedad que siente frente a las cámaras y en cada visita a los Juzgados. Esta situación ha complicado su retorno al negocio familiar y sus estudios para guarda forestal, al sentirse abrumado por la presión mediática.

A la espera de su juicio, Antonio Tejado continúa intentando retomar su vida, aunque el proceso es lento y difícil. Su silencio y su nueva imagen proyectan la presión que ha enfrentado y cómo ha intentado adaptarse a su situación actual. El futuro de Tejado sigue siendo incierto, pero parece claro que su vida no volverá a ser la misma.