La actitud de Juan Carlos I lleva a Letizia a dar un paso atrás y tomar nuevas medidas

Juan Carlos I  acaba de cumplir los 86 años por todo lo alto en Abu Dhabi, una celebración que ha generado mucha crispación en Zarzuela.

Justo cuando la paz volvía reinar dentro de la familia real, y más tras el sonado reencuentro que celebraron con motivo del 60 cumpleaños de la infanta Elena.

Sin embargo, parece que se trataba de un simple espejismo, ya que la reciente actitud que ha mostrado Don Juan Carlos, habría llevado a que Letizia dé un paso atrás.

Y es que las recientes imágenes que se han publicado del monarca durante su fiesta de cumpleaños, podrían haber enfurecido por completo a los reyes, que están dispuestos a tomar medidas.

En las mismas, se ve al emérito cortando una tarta con el escudo de la Corona, lo que habría supuesto un claro "acto de provocación" hacia su hijo y su nuera Letizia

Justo por eso, los grandes avances que habían hecho en los últimos meses, se han ido por tierra de la peor manera. Así, según publica la revista Semana, han cortado cualquier posibilidad de que Juan Carlos pudiese volver a alojarse en Zarzuela.

"No ven con buenos ojos que hayan salido estas imágenes a la luz pública", sostienen desde el entorno cercano a los reyes. 

Letizia, molesta con el rey Juan Carlos 

Y es que desde la institución hubiesen visto bien si la publicación de las imágenes se hubiera realizado a través de la Agencia EFE, "como se hizo con las imágenes del año pasado cuando acudieron sus nietos". 

Sin embargo, en esta ocasión queda claro cuál era la intención, ya que Juan Carlos ha recurrido nada menos que a la revista ¡Hola!, que es el medio que nos ha presentado la exclusiva en portada.

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De ese modo, todo lo que habían trabajado para dar pie a un acercamiento entre las dos partes, ya no tendría ningún sentido. 

"Claro que puede celebrar su cumpleaños, pero no convirtiéndose en la portada de una revista", aseguran. "Con el Rey Juan Carlos se requiere discreción y esto es todo menos discreto. Hay quien lo puede entender como una provocación", alegan.

Sobre todo, porqueLetizia y  Felipe no entienden cuál es el fin de hacerlo público, y menos ahora, cuando las aguas estaban volviendo a su cauce.

Además, hay que tener en cuenta que en la familia real siempre han cuidado mucho su privacidad, por lo que no le ven sentido a compartir ese aspecto de su vida con millones de personas.